Chávez, con su hija Rosa María, es recibido por el presidente cubano en La Habana.
Imagen: Télam.

Nuevos chequeos médicos le fueron realizados al presidente de Venezuela ayer en Cuba, antes de ser sometido a una intervención quirúrgica entre mañana y pasado, por un tumor en el mismo lugar donde tuvo cáncer.

El mandatario Raúl Castro lo recibió el viernes por la noche en el aeropuerto de La Habana. Hugo Chávez viajó acompañado de sus hijas Rosa María y Rosinés, su hermano Adán (gobernador del Estado de Barinas) y su ministra de Salud, Eugenia Sader. El presidente venezolano, de 57 años, afronta su tercera operación después de que en junio de 2011 fuera intervenido de urgencia en La Habana por un absceso pélvico y unos días después volvió al quirófano también en Cuba para que le extirparan un tumor cancerígeno en la misma zona.

Desde entonces, el presidente de Venezuela viajó en otras cinco oportunidades a la isla para recibir quimioterapia o para exámenes médicos. En el último de esos chequeos hace una semana se le detectó una lesión, según la denominó el propio Chávez, de dos centímetros en la misma zona donde fue intervenido anteriormente y con altas probabilidades de ser maligna. Durante su estancia en la isla, la ministra venezolana Eugenia Sader ejercerá como portavoz de Chávez para explicar los detalles sobre la marcha de su tratamiento y operación.

“Tengo fe en que todo va a salir bien, estoy lleno de fe, de amor, de esperanza y tengo la certeza de que vamos a derrotar esta adversidad como hemos derrotado, hemos vencido, muchas otras”, declaró Chávez a la estatal Venezolana de Televisión al llegar a La Habana. En Cuba, los medios de comunicación destacaron ayer la llegada del presidente venezolano a la isla y el recibimiento que le brindó el general Castro, si bien en la isla no se han producido hasta el momento declaraciones públicas de sus autoridades sobre la nueva operación de Chávez.

En las calles, muchos cubanos están al tanto de la salud del presidente venezolano y algunos dicen estar orgullosos por la confianza que Chávez deposita en los médicos de la isla.

En los últimos años, Venezuela se convirtió en el principal aliado político y el mayor socio comercial de Cuba, y el intercambio bilateral pasó de 200 millones de dólares en 2005 a más de 6000 millones en 2010, un volumen comercial que supone casi el 40 por ciento del total de la isla. Venezuela le provee a Cuba 100.000 barriles de crudo diarios que La Habana paga en parte con servicios médicos, educativos y deportivos.

Algunos presidentes de la región conversaron telefónicamente en las últimas horas con Hugo Chávez, con motivo de su próxima operación, como el caso de los mandatarios de Brasil, Dilma Rousseff, y Colombia, Juan Manuel Santos, quienes le han deseado suerte y una pronta recuperación. Expresó que durante su estadía en Cuba, aparte de someterse a los estudios médicos previos a la operación, aprovechará para releer algunos textos, en especial uno titulado El Poder está en usted, así como otro libro titulado el Modelo Rentístico Petrolero Venezolano. Chávez aspira a lograr un nuevo mandato presidencial en los comicios del 7 de octubre próximo, cuando enfrentará a Henrique Capriles, candidato único de la oposición surgido en primarias hace un par de semanas.

Especialistas en oncología citados ayer por el diario venezolano El Universal indicaron que si la nueva lesión de Chávez es una recurrencia, el mandatario tiene posibilidades de curarse, aunque señalan esos médicos que podría sentirse muy fatigado para mantener el ritmo en la campaña electoral. Richard Schilsky, especialista en cáncer gastrointestinal de la Universidad de Medicina de Chicago, dijo que si la lesión fuese maligna y está localizada, pueden sacarla y tienen buenos márgenes quirúrgicos, y tiene posibilidad de que pueda sanarse.

Charles Fuchs, director del programa de oncología gastrointestinal del Dana-Farber Cancer Institute en Boston, dijo que el cáncer rectal es más propenso a la recurrencia local que el de colon, porque la pelvis es una zona ajustada donde es difícil que los cirujanos obtengan márgenes limpios, pero admitió que no puede dar más precisiones en el caso de Chávez porque nunca se supo el origen de la enfermedad que padece.

“Cuando de verdad este cuerpo se acabe, Chávez no se acabará porque Chávez no soy yo, Chávez está en las calles, en nuestro pueblo, se hizo un arma nacional para seguir dando la batalla por Venezuela”, dijo emocionado el viernes en su despedida por las calles de Caracas, repletas de simpatizantes con remeras rojas. El presidente desfiló dentro de un auto descapotable, parado sobre el asiento, con medio cuerpo hacia afuera, inclinado ante cientos de saludos. “Por este profundo amor, por esta razón amorosa, que sobre todo desde hace casi un año se ha venido fortaleciendo en cada músculo de mis células, en cada célula de mi cuerpo, en estos últimos meses, si algo ha crecido, es el amor por esta patria, por este pueblo, por esta causa bolivariana, por amor nos hicimos soldados, hemos vivido lo que hemos vivido, hemos sufrido lo que ha tocado sufrir, hemos hecho hasta lo imposible, por amor a lo que esta Patria fue, es y será, hemos hecho todo esto”, reflexionó Chávez.

Los presidentes de Brasil y Colombia reiteraron sus llamados a Chávez para desearle suerte en esta difícil etapa. “Ayer tuve la oportunidad de hablar con el presidente y de desearle suerte”, confirmó Santos en la apertura de un consejo gubernamental en Cali.