EL MUNDO › ASUMIO EL NUEVO PARLAMENTO CON
MAYORIA ABSOLUTA DE LA COALICION DE TABARE
Un paso al Frente Amplio en Uruguay
La coalición de la izquierda Encuentro Progresista-Frente Amplio juramentó ayer en el Parlamento, presidido por Pepe Mujica. Es la primera fuerza política que en los últimos 40 años no necesita de otras para gobernar en Uruguay. El electo presidente frenteamplista Tabaré Vázquez asumirá el próximo 1° de marzo.
Ayer fue una jornada histórica en Uruguay. Asumió el nuevo Parlamento elegido el pasado 31 de octubre, con mayoría absoluta de la coalición de izquierda del presidente electo, Tabaré Vázquez. La izquierda, tras 174 años de control alternado de los partidos tradicionales, Colorado y Blanco, se convirtió en la primera fuerza política que en los últimos 40 años no necesita apoyo de otras formaciones para gobernar. La coalición Encuentro Progresista-Frente Amplio-Nueva Mayoría (EP-FA-NM) que asumirá el 1° de marzo rompe con el bipartidismo que rigió durante 170 años en el país vecino al lograr el 50,45 por ciento de los votos.
La Asamblea General, la reunión de ambas cámaras parlamentarias, será presidida provisionalmente –hasta dentro de 15 días– por el ex guerrillero tupamaro José Mujica, primer titular de la lista más votada dentro del coalición. Mujica abrió la Legislatura y tomó juramento a sus pares. Vestido de manera informal, sin corbata y con su habitual campera azul, Mujica rompió la monotonía del trámite advirtiendo a los presentes: “Ustedes verán algunas fallas de formalismo en esta sesión de Senado”. Antes de ingresar al recinto, el legendario tupamaro había insistido en declaraciones a la prensa: “Yo no voy a usar la instancia de hoy para cobrar deudas pendientes, porque el talonario de las deudas lo perdí, aunque la memoria no”. El momento que generó más expectativa en el recinto de sesiones del Palacio Legislativo fue protagonizado por dos antagonistas, Mujica y Julio Sanguinetti, en el momento de la toma de juramento. “Es para mí un honor preguntarle si jura usted desempeñar debidamente el cargo de senador como marca la Constitución de la República”, preguntó Mujica al dejar investido como senador al ex presidente colorado, con quien está políticamente en las antípodas y con quien ha tenido duros duelos verbales. Durante la campaña electoral, Sanguinetti agitó el fantasma del retorno de la “subversión” tupamara.
Cuando Mujica le tomó el juramento al también ex guerrillero Eleuterio Fernández Huidobro, se salió apenas del libreto para calificarlo de “compañero de todas las horas, de ayer y de hoy”. Y cuando invistió al senador Enrique Rubio, deslizó “cosas veredes, Sancho”. Tras jurar todos los senadores, Mujica se dirigió a Fernández Huidobro, quien como segundo senador de la lista más votada debía investirlo a él. “Perdóneme dos palabras. La vida tiene estas zancadillas, hemos pasado una vida, y ni el mejor novelista pudo haber pensado estas cosas. Compañero del alma de todas las horas, tómeme el juramento”, le dijo Mujica, arrancando una ovación de los presentes. Visiblemente emocionado, Mujica juró con la mano derecha en el corazón y Fernández Huidobro le dijo: “Felicitaciones, querido hermano”. Mujica encabezará el Senado y la Asamblea General por 15 días, hasta que el 1° de marzo el vicepresidente electo Rodolfo Nin Novoa asuma tales funciones. Mujica luego se convertirá en ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, el sector más importante de la economía uruguaya. Estará al frente de la cartera durante un año, después evaluará su futuro, pero ya ahora está convencido de que “acabará la luna de miel” y que tanto él como el gobierno desilusionarán a muchos por las enormes expectativas creadas.
Al renovarse la 46ª Legislatura por un período de cinco años, la coalición de izquierda logró 16 senadores (más el voto de Nin) sobre 30 y 52 diputados sobre 99 en las elecciones en las que el socialista Tabaré Vázquez resultó electo presidente en primera vuelta. El Partido Nacional (PN) cuenta con 11 senadores y el por ahora gobernante Partido Colorado (PC, con sectores socialdemócratas y liberales) logró tres senadores. En la Cámara de Diputados, la fuerza de izquierda logró 52 bancas, el PN, 36 y el PC, 10.
Por primera vez en la historia del país, esta Cámara será presidida por una mujer, la ex maestra Nora Castro, perteneciente al grupo político de Mujica. Salvo contadas leyes que requieren mayorías extraordinarias y los nombramientos de los directorios de empresas estatales, que exigen el apoyo de tres quintas partes de los votos parlamentarios, la izquierda contará con una mayoría de 69 sobre 130 votos en la Asamblea General.
Con un importante recambio de parlamentarios, hay muchas “caras nuevas”, en su mayoría de la bancada de la izquierda. Por primera vez desde el retorno de la democracia, un ex presidente ocupa un escaño. El dos veces mandatario de Uruguay, Sanguinetti, aceptó presidir la representación del Partido Colorado en el Senado, cargo para el que fue elegido en otras ocasiones pero que nunca asumió. En cambio, el presidente saliente, Jorge Batlle, pese a ser elegido senador, no ocupará el cargo y será reemplazado por el actual ministro de Economía, Isaac Alfie, su suplente.
Después de la ceremonia de investidura, Mujica y Castro pasaron revista al Batallón Florida. Eso “es recontrasimbólico” porque “a mí me metió preso el Batallón Florida”, dijo Mujica. Y sintetizó: “Todo esto es medio kafkiano, medio novelesco”.