En una semana hiperactiva desde el punto de vista político, Néstor Kirchner recibió ayer en la quinta de Olivos al senador Daniel Filmus, el legislador porteño Juan Cabandié y el presidente del Banco Credicoop, Carlos Heller. En la reunión se analizó el mapa político porteño, la situación económica y el cronograma de pagos de la deuda. Tras casi dos horas de charla, Kirchner acordó con sus invitados construir un “espacio plural y diverso” que incorpore a sectores independientes. Un ejemplo será el Partido Solidario, la agrupación que Heller lanzará el próximo 6 de octubre. “Esto no implica sumarme al Frente para la Victoria ni al PJ, sino avanzar en el armado de una coalición desde el espacio de cada uno y sobre la base de acuerdos programáticos”, aseguró Heller a PáginaI12.

La reunión de Filmus, Heller y Cabandié con el santacruceño se venía preparando desde hace un mes. El encuentro terminó concretándose ayer al mediodía y la charla se convirtió en otro capítulo de una agenda a puro vértigo para Kirchner. En menos de una semana estuvo con dirigentes de la CGT, con intendentes bonaerenses y con el trío porteño que supo competir contra la lista de Mauricio Macri. La reunión comenzó a las 11 y terminó a las 12.45. Fueron casi dos horas de análisis de la situación política y económica en las que Kirchner no se privó de ningún recurso para tratar de convencer. Mostró encuestas sobre la imagen positiva del Gobierno que muestran una mejora para la Rosada, dijo que los recursos fiscales alcanzan para los pagos del año próximo y descalificó al ahora denunciante Guido Antonini Wilson en sus nuevos dichos sobre la valija.

Una de las primeras conclusiones de la charla fue que Kirchner anunció su disposición a colaborar con el espacio plural. “Yo voy a apoyar desde mi lugar en todo lo que sea necesario. Si me quieren ver, avísenme. Cuenten con mi apoyo”, fueron las palabras del santacruceño. En medio de la reunión surgieron inevitablemente los nombres del ex jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y el ex jefe de Gobierno, Jorge Telerman. Era imposible hablar del distrito porteño sin mencionarlos. “Alberto es mi amigo”, fue lo único que dijo Kirchner sobre su otrora colaborador esencial. Y cuando le preguntaron por Telerman, Kirchner se limitó a decir que la última vez que lo había visto él todavía era presidente. La pregunta por Telerman tenía una obvia explicación: desde hace varias semanas su apellido suena como uno de los posibles candidatos aliados al kirchnerismo. Se lo menciona como primer candidato a legislador de la ciudad.

En la reunión también hubo espacio para temas espinosos, como las mediciones de inflación del Indec. También se coincidió en que era imprescindible postergar por un tiempo la definición de las candidaturas. “Hablar ahora es prematuro y nos limitaría para la construcción de la fuerza. Concentrémonos en el armado”, fue la consigna. La hipótesis de mínima de los dirigentes que desfilaron por Olivos es repetir el porcentaje de la fórmula Filmus-Heller en la primera vuelta de la elección de jefe de Gobierno. El kirchnerismo arañó el 24 por ciento en aquella elección. “Si logramos entre 25 y 30, con una elección legislativa, que no polariza y suele fragmentar los votos, sería un objetivo importante”, evaluó ante PáginaI12 uno de los interlocutores de Kirchner.

Una de las formas de lograr ese objetivo sería incorporar nuevos aliados, por ejemplo sectores que compitieron con la fórmula Filmus-Heller. Siguiendo esa lógica, uno de los nombres cantados es Telerman. Hace un año intentó mantener la Jefatura de Gobierno aliándose con Elisa Carrió y formando la coalición Más Buenos Aires. Consultado por este diario, Filmus convocó a seguir ampliando el espacio progresista para presentar una oferta electoral más atrayente. “Por las características que tiene la ciudad, este distrito merece tener una opción plural, que recupere a todos los que estuvieron trabajando con nosotros el año pasado y que se pueda ampliar a otras fuerzas progresistas”, argumentó.

La visita que Filmus, Heller y Cabandié hicieron a Olivos despertará rápidas lecturas en la política porteña. Mientras Filmus trata de posicionarse como el principal crítico de Macri a través del Centro de Estudios Porteños (CEP), un virtual foro de seguimiento de las políticas del gobierno macrista, Heller prepara el lanzamiento de su sello electoral. Se llamará Partido Solidario y su presentación en sociedad será en un escenario que ya es emblema de los encuentros del centroizquierda: el Hotel Panamericano. Tercero en discordia, Cabandié también parece tener reservado bastante protagonismo. Cada vez que se encuentra con dirigentes porteños, el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, suele pedirles una opinión sobre el desempeño y la proyección política de Cabandié. “Tenemos que armar un espacio amplio sin perder identidad ni autonomía”, fue la frase más escuchada en la residencia presidencial.