El segundo encuentro paritario entre el gobierno porteño y los sindicatos docentes tuvo lugar ayer en Paseo Colón 255, sede de la cartera educativa. Como había adelantado el ministro Esteban Bullrich, se habló de las condiciones laborales, dejando la discusión salarial para la próxima reunión, cuando esperan que esté acordado el aumento a nivel nacional. Sin embargo, el secretario general de UTE-Ctera, Eduardo López, alertó que hace falta “un fuerte aumento salarial”. “Faltan 500 docentes, es la prueba más clara de que los salarios están muy bajos”, explicó.

“No discutiremos el aumento hasta tanto no se reúnan las centrales de maestros en la negociación nacional”, se había atajado Bullrich antes de reunir en el Ministerio de Educación a los representantes de las 17 centrales sindicales de docentes porteños. Los gremios aprovecharon para llevarle varias propuestas para mejorar la política educativa.

“En la primera reunión le planteamos la problemática que existe en el primer ciclo de la primaria con la repitencia y el aprendizaje”, explicó López a Página/12. En esta oportunidad aportaron una propuesta: “el Maestro Acompañante de Trayectorias Educativas (MATE)”. Se trata de un docente guía que acompaña a las maestras jardineras en el desarrollo educativo de la franja de alumnos que van de los seis a los ocho años. Afirmó que “en algunas provincias se está llevando adelante y acá donde es un cargo subsidiado, en algunas escuelas privadas”. Obtuvieron el compromiso de Bullrich para crear 120 cargos de este tipo a partir del 27 de febrero. Confió en que la iniciativa “mejore la calidad educativa y produzca una cierta equiparación del sector público con el privado”. También reclamaron un mayor control sobre la política de subsidios del ministerio. “Hay 70 institutos de educación superior beneficiados con subsidios, entre los que están por ejemplo el Club River Plate y la ORT. Debemos destinar los recursos estatales a ámbitos mucho más vulnerables, a instituciones que cumplan una función social”, reclamó López.

A pesar de la postergación de las negociaciones salariales, López dio cuenta de que “hay que dar un fuerte aumento salarial”. “Es una ciudad cara y con salarios bajos. No hay maestros, ni para los cargos ni para la colonia. Se jubila una maestra y no hay nadie”, argumentó el representante sindical, agregando que es una situación que “el ministro reconoce pero no da respuesta”. Los sindicatos no han oficializado el número en torno del que pedirán que gire el aumento de 2013, pero no bajará del 25 por ciento, llevando el sueldo mínimo de un maestro porteño de grado sin antigüedad de 3800 o 3900 pesos. Además reclamaron extender la emergencia educativa y empezar a convocar a estudiantes de segundo y tercer año del profesorado para llenar las vacantes vigentes.

Informe: Juan Manuel Frías.