En Canciones de cuna y luna es posible encontrar no sólo composiciones dedicadas a una y otra sino, también, un sonido que marcó fuerte a la responsable del espectáculo. Es que, allá por 1996, Ethel Koffman editaba Lilâ, un primer disco que presentaba a su voz acompañada de una sonoridad camarística. Esa misma estética es la que atraviesa al proyecto que, a partir de una propuesta del Centro Cultural Parque de España, podrá verse mañana en el Teatro Príncipe de Asturias (Sarmiento y el río), donde esta noche actuará el pianista Víctor Parma (ver recuadro).

Como parte de la programación de Bienvenidos a la luna, el concierto de Koffman tendrá una oportuna introducción con la charla que ofrecerá la astróloga Patricia Ordóñez, quien ahondará en la simbología del satélite. En ese sentido, el conocimiento de Ordóñez influyó también en la diagramación del concierto, según explicó Koffman a Rosario/12: "Cuando hablamos con Patricia, le pedí información sobre el simbolismo de la luna, y ella me habló sobre este aspecto femenino, maternal, de la capacidad que tenemos para dar cobijo, protección, nutrición. Entonces por un lado se me ocurrió que todo esto tenía mucho que ver con las canciones de cuna, pero realmente pensé que el repertorio no podía ser sólo de canciones de cuna, por la densidad sonora que eso tiene, y empecé a buscar otras canciones que hablan de la luna".

De esa manera, el encuentro (que se desarrollará desde las 21.30, con entrada libre y gratuita) abrirá con una charla que impregnará al público "de la energía lunar, porque Patricia le va a dar un toque bastante especial", según anticipó la cantante que de inmediato, y sin intervalo alguno, subirá a escena acompañada por Leonel Lúquez (piano y arreglos), Marcelo Petetta (guitarra), Luis Giavón (oboe), María Jesús Olóndriz (violoncello) y Charly Pagura (contrabajo), sus secuaces durante la grabación de Lilâ. En esta suerte de reencuentro, el grupo le dará un toque camarístico a obras como "Lo que usted merece" de Jorge Fandermole, "La media luna" de Miguel de Unamuno y Sergio Aschero, "Don Dolón Dolón" y "Canción de bañar la luna" de María Elena Walsh.

Por fuera de las cunas, Koffman navegó por un repertorio vasto, diversidad que se sostiene en un espectáculo que incluirá otras canciones como "Luisa" de Jobim, "Hijo de la luna" de José María Cano, "Mar y luna" de Chico Buarque, "Moonriver" de Henry Mancini y "Tonada de luna llena" de Simón Díaz. Al respecto, Koffman remarcó: "Obviamente cada canción y cada arreglo de Leonel Lúquez es una creación. La mayor parte del repertorio está arreglado para el quinteto, que tiene un sonido muy similar al de Lilâ. A mí me inspiró bastante pensar en este repertorio con este grupo. En este momento estoy trabajando con otro grupo, con un sonido más jazzero, con el que estoy armando otro disco que no tiene nada que ver con este sonido". Y si bien la posibilidad de dejar registrado este proyecto es incierta, a Koffman el trabajo le representó cierto descubrimiento. "Me encantaría grabar ésto, pero tengo como prioritario el otro repertorio para el tercer disco, que es muy diferente", expresó.