"Las empresas han demostrado su incapacidad de ejecución de un programa de inversiones para satisfacer la necesidad del usuario; negligente es la definición conceptual más estricta respecto de lo ocurrido con el servicio eléctrico", señaló esta mañana el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. Así justificó la decisión de quitarles a Edesur y Edenor el manejo del Fondo para Obras de Consolidación y Expansión de Distribución Eléctrica (FOCEDE) que las distribuidoras eléctricas recibían a través de un plus que les cobraban a sus clientes.

El Gobierno oficializó hoy la decisión de quitarles a esas empresas la administración de esos fondos para obras como sanción por los reiterados cortes de energía registrados durante la ola de calor en Capital Federal y el conurbano bonaerense. El plan, ahora a cargo del Estado, se inicia a partir de hoy mismo con cinco obras en los barrios porteños de Villa Mitre, Flores, Liniers, Santa Rita y Villa Crespo.

El Ministerio de Planificación explicó que "los fondos remanentes mencionados, de no haber sido por la actitud negligente de las concesionarias, deberían haber sido aplicados a obras que hubieran atenuado, al menos parcialmente la situación, de público y notorio conocimiento, que hoy padecen los usuarios".

En rueda de prensa en Casa de Gobierno, Capitanich dijo que se comenzará en principio con la ejecución de cinco obras y remarcó que "las empresas han demostrado su incapacidad para desarrollar un programa de inversiones". Según la normativa, el saldo del fondo para obras asciende al 20 de diciembre pasado a la suma de 54,3 millones de pesos para Edesur y a 161 millones para Edenor.

"Las empresas han manifestado entre ambas que el programa de inversión necesario es de 4000 millones de pesos y nosotros queremos que las inversiones se hagan ya, con la administración del Estado", concluyó Capitanich. Para coordinar el plan de obras inmediatas, el subsecretario de Coordinación y Control de Gestión de Planificación, Roberto Baratta, se reunió ayer con los gerentes de Edesur y con representantes de los municipios bonaerenses en los que opera esa compañía.

En otro orden, el Gobierno oficializó hoy los resarcimientos que deberán abonar a sus clientes las distribuidoras eléctricas por los cortes de suministro de las últimas semanas. La medida establece el pago de 490 pesos para los afectados por las interrupciones de suministro de energía eléctrica de entre 12 y 24 horas, ocurridas durante el período iniciado el 16 de diciembre pasado y hasta el momento de su reposición total.

Para los cortes de 24 a 48 horas, el resarcimiento será de 760 pesos, y para los superiores a 48 horas corridas se elevará a 870 pesos, tal como había anticipado la semana pasada el ministro de Planificación, Julio De Vido. Si los usuarios afectados también fueron damnificados por los ceses del servicio registrados a fines de los años 2010 y 2012, el monto del resarcimiento será el doble.

El resarcimiento a los usuarios deberá ser acreditado en la próxima factura a emitirse, consignando en forma desagregada y mencionando la resolución del ENRE, el crédito determinado y el saldo remanente, cuando corresponda. Si ese crédito al usuario supera el valor final de la próxima factura, el saldo tendrá que ser necesariamente acreditado en las subsiguientes facturas, hasta concluir el resarcimiento.

El ENRE aclaró que esos pagos no incluyen los daños producidos a las instalaciones y/o artefactos de propiedad del usuario, cuyo reconocimiento cuenta con un procedimiento específico.