La protesta se llevó a cabo frente al edificio Libertador, sede del Ministerio de Defensa y del Ejército, situado en la avenida Paseo Colón y Alsina, de esta capital.

Con fusiles de juguete y un pinguino gigante, el "escrache" fue liderado por la dirigente Vilma Ripoll (MST-Nueva Izquierda), quien denunció que en el Gobierno nacional "hay corrupción estructural".

"Nosotros denunciamos que el Gobierno quiere tapar un hecho de corrupción culpando a un juez corrupto", señaló Ripoll en referencia a que la administración de Néstor Kirchner acusó al juez en lo Penal y Económico Guillermo Tiscornia de involucrar a Garré en una causa por el contrabando de partes de fusiles FAL.

En declaraciones a la agencia DyN, la dirigente de izquierda apuntó que los "ministros de Kirchner se manejan con impunidad" y recordó que Fabricaciones Militares (FM), desde donde salieron esos FAL, "depende" del ministro de Planificación, Julio De Vido.

"Quedó claro que acá hubo un negociado, se limaron los números de las series de las armas", añadió Ripoll.

En la protesta de hoy llevaron un pingüino gigante que ya participó en anteriores escraches a Skanska y a la ex ministra de Ecomomía Felisa Miceli.

Ripoll sostuvo que "Garré dijo no conocer ni un FAL, pero firmó el decreto autorizando una exportación fraudulenta".

Los casos de Skanska, (Felisa) Miceli, (Romina) Picolotti y ahora Garré confirman que con este gobierno se mantiene una corrupción estructural".