El grito “Diana corazón, acá tenés las travas para la liberación” estalla en el Anexo de la Cámara de Diputados de la Nación para plantear una vez más en ese recinto que la necesidad debe materializarse en derecho. La noche del 16 de agosto la Cámara de Diputados se abrió a la presencia de las organizaciones que nuclean a una población sometida a constante violencia y criminalización, negada a la posibilidad de educarse, cuidar su salud, trabajar. Para ingresar al anexo había que identificarse en mesa de entradas, exhibir el documento nacional de identidad, atravesar un molinete electrónico ante la mirada policial. Esta vez sin el trato tan habitual en calle y comisarías consistente en: insultos, golpes, requisa vejatoria, pianito, calabozo. Érase esta vez que el trato era amable y un empleado de Diputados circulaba por las mesas larguísimas sirviendo vasitos plásticos con agua fresca o café. Aunque por ahora –subrayar “por ahora”– las puertas de acceso laboral a la administración pública nacional están cerradas a las travestis y a les trans. Por eso vienen a presentar, de la mano de un grupo de diputades, el proyecto de Ley Nacional Diana Sacayán de Cupo Laboral Travesti Trans.
Viriles próceres cisgénero, todos combatientes a caballo y sable, custodian la sala del anexo. El general José de San Martín, probable hijo secreto de la guaraní Rosa Guarú, el general Manuel Belgrano a quien el chismerío homofóbico (homoodiante) higienista de fin de siglo XIX enfrentó al régimen heterosexual y el salteño Martín Güemes, tan salteño como su hermana Macacha y como nuestra prócera Lohana Berkins (para ellas no hay cuadro), celebran el ingreso (al menos por una noche) de Diana al panteón de héroes y héroas de la Xatria. En tres paredes brilla -por esta noche- el retrato de Amancay Diana Sacayán sobre pantalla LED.
Se contraponen las imágenes de aquella jornada en el anexo. En las fotos de la tarde puede verse a les científiques reclamando ley de financiamiento para ciencia y tecnología. Esa ley ya tiene media sanción del Senado. Le falta la de Diputados. Para la noche quedó reservado el reclamo de la población travesti y trans: “pedimos vivir”. Superar la expectativa de vida de 35-40 años promedio. La prueba es la propia Diana Sacayán. Impulsora de la ley que se fue a presentar a Diputados, defensora de los derechos humanos reconocida internacionalmente y víctima de travesticidio a los 39 años. Es urgente. Cada día se cobra la vida de una travesti o una mujer trans en las calles, en un cuarto, en un calabozo. Por desidia del Estado o por intención estatal. Porque cuando la desidia es sostenida y constante procede desconfiar de la falta de intención.
La presentación fue organizada por el Frente Nacional por la Ley Diana Sacayán. En su artículo 1º la ley establece que “el Sector Público Nacional debe ocupar, en una proporción no inferior al 1% de la totalidad de su personal, a personas travestis, transexuales y transgéneros, y establecer reservas de puestos de trabajo a ser exclusivamente ocupado por ellas, con el fin de promover la igualdad real de oportunidades en el empleo público”. El proyecto cuenta ya con más de 40 firmas de diputades de seis bloques y se presentó a instancias de la diputada Mónica Macha, de Unidad Ciudadana. En la Cámara se hará una labor transversal, como se dio durante la lucha por el aborto legal, seguro y gratuito.
Expusieron argumentos esta noche Florencia Blasi (Infancias Libres), Lourdes Arias (La Cámpora Diversia), María Pía Ceballos (Mujeres Trans, de Salta), Martín Canevaro (100% Diversidad y Derechos), Ivana Gutiérrez (Conurbanos por la Diversidad), Marcelo Suntheim (CHA), Agustina Ponce (Asociación por un Mundo Igualitario, de Mar del Plata), Marcela Tobaldi (La Rosa Naranja), Say Sacayán (Movimiento Antidiscriminatorio de Liberación)y diputades que apoyan el proyecto.
La Ley de Cupo Laboral Travesti Trans en la provincia de Buenos Aires fue el último logro de Diana Sacayán. Sancionada el 17 de setiembre de 2015 –pocos días antes del travesticidio de Diana–, hoy la gobernadora María Eugenia Vidal continúa negándose a reglamentarla.
El Frente sostiene que “este proyecto no puede disociarse del nombre de su creadora puesto que fue Diana quien encabezó esta ley como referenta y defensora de Derechos Humanos reconocida en el ámbito nacional, regional e internacional”.
Durante la presentación se expuso la realidad de las personas trans y travestis tanto en contextos urbanos como en contextos rurales. La expulsión de los hogares a edad temprana ocurre tanto en las familias urbanas como en las comunidades indígenas. Tema que puso sobre el tapete la activista de Salta, María Pía Ceballos.