Las boletas de luz del área metropolitana aumentarán en promedio un 55 por ciento el año que viene. La suba será de a tramos, un 26 por ciento en febrero a causa de la reducción de subsidios a la generación, un 14 por ciento en marzo que se explica por la suba de los ingresos de las distribuidoras y luego un 4 por ciento en mayo y otro 4 por ciento en agosto. La acumulación de esos incrementos llega al 55 por ciento anual, bien por encima de la estimación de inflación del propio Gobierno. En marzo, un usuario residencial medio estará pagando 1275 pesos por mes por el servicio de luz. Además, fuentes oficiales adelantaron que la suba del gas sería del 35 por ciento en abril. El Gobierno quiso ayer apurar las malas noticias, con anuncios de subas de transporte, luz y gas para 2019. Por su parte, la tarifa social que reciben casi el 30 por ciento de los hogares desde el año que viene queda a cargo de las provincias y de la Ciudad de Buenos Aires, con destino todavía incierto para usuarios del interior del país. Con ese cambio, el gobierno nacional se desentiende de un costo estimado de 25 mil millones de pesos anuales.
La agenda de aumentos de servicios públicos a cargo del Gobierno define un primer semestre de 2019 muy cargado en materia inflacionaria. Ya está confirmado el incremento del 17 por ciento de la boleta de agua en enero. La luz hará lo propio en un 26 por ciento en febrero y otro 14 por ciento en marzo, lo que da un total del 43 por ciento. El transporte subirá un 40 por ciento en el primer trimestre y el agua avanzará otro 27 por ciento en marzo, totalizando un total de casi el 50 por ciento. Además, el gas subiría un 35 por ciento en abril. Incluso si a pesar de la notable suba del riesgo país el dólar permaneciera estable –algo que corre serias dudas– el piso inflacionario para el comienzo de 2019 será muy alto.
En todos los casos, los aumentos porcentuales ya se aplican sobre valores muy altos, con lo cual los números finales son en algunos casos exorbitantes. En el caso de la luz, el Gobierno aplicará un aumento del precio de la energía mayorista del 38 por ciento en febrero, lo cual se traduce en el incremento del 26 por ciento en las boletas durante ese mes. En marzo, el valor agregado de distribución que constituye el ingreso de las distribuidoras subirá alrededor de un 33 por ciento, lo cual impacta en otra suba del 14 por ciento de la boleta. El incremento acumulado hasta ese momento en las boletas que paga el usuario será del 43 por ciento. Luego resta otro aumento del costo de generación del 6 y del 8 por ciento en mayo y agosto, lo cual se traduce en dos subas del 4 por ciento. Los cuatro incrementos (febrero, marzo, mayo y agosto) totalizan un 55 por ciento.
Fuentes oficiales distribuyeron datos sobre cómo quedarán las facturas de luz para marzo, o sea, antes de los dos últimos aumentos del año. Un usuario de la categoría R2, que concentra el 36 por ciento de los usuarios, pagará en promedio 1275 pesos por mes impuestos incluidos. La categoría R1, que explica el 33 por ciento de los usuarios, tendrá una boleta promedio de 599 pesos. “Casi un 70 por ciento de los hogares pagará menos de 1275 pesos por mes”, concluyeron fuentes oficiales. La categoría R3, que concentra el 9 por ciento de los usuarios, queda en un promedio de 1647 pesos. En tanto, la categoría más alta (R9), con apenas el 1 por ciento de los usuarios, tendrá una boleta mensual de 12.100 pesos. Fuera del área metropolitana, las boletas son aun más caras. En marzo, un usuario medio que consume 300 kWh/mes pagaría en Santa Fe 1742 pesos por mes de luz y en Córdoba, 2194 pesos. En San Juan, la factura sería de 1429 pesos y en Catamarca, de 1517 pesos. La diferencia se explica por el importe que cobran las empresas provinciales, en parte justificado por la menor escala económica frente a Edesur y Edenor, aunque el Gobierno les atribuye ineficiencia.
La suba de los servicios se encuadra en el plan de ajuste acordado con el FMI. Según los datos oficiales, en 2015 un usuario pagaba apenas el 10 por ciento del costo de la tarifa eléctrica. Este año, ese valor se ubica en el 65 por ciento y en 2019 llegaría al 76 por ciento (24 por ciento de subsidios). Los subsidios a la energía eléctrica en 2017 ascendieron a 85 mil millones de pesos, este año subieron un 41 por ciento hasta los 120 mil millones a causa de la devaluación y a pesar de los aumentos y quedarían en 2019 en 100 mil millones de pesos. Medidos en dólares, los subsidios a la energía eléctrica y el gas alcanzaron los 17.232 millones de dólares en 2015. En 2016 se ubicaron en 14.613 millones y en 8056 millones en 2017. Este año cerrarían en 6885 millones y el año que viene, en 5114 millones de dólares. La contracara es el aumento de las facturas: un usuario con una boleta bimestral de luz de 36 pesos en diciembre de 2015, es decir, de 18 pesos mensuales, pagará en agosto del año que viene 840 pesos, sin contar impuestos.