Por Diego Schurman y Felipe Yapur
Tiempo, la clave es el
tiempo. Eso fue lo que Alberto Kohan intentó negociar ayer con Eduardo Duhalde. Pero el
secretario general de la Presidencia no encontró todo el eco que esperaba. Según el
duhaldismo, el gobernador le dijo que aceptará una nueva postergación de la interna
partidaria siempre y cuando Carlos Menem no intente participar ni siquiera forzando un
dictamen de la Corte. El funcionario no le prometió cumplir con ese requisito porque
sería admitir la retirada anticipada del Presidente. Por eso ayer las dos corrientes se
mantuvieron en sus trece: el duhaldismo insistiendo con la posibilidad de convocar a un
plebiscito no vinculante y el menemismo amenazando con postergar hoy mismo la interna
partidaria, ya sea para buscar nuevas alternativas que permitan lanzar a Menem o, en su
lugar, a Carlos Reutemann.
Kohan llegó a la quinta Don Tomás, que Duhalde tiene en San Vicente, a bordo del
helicóptero presidencial. A pesar del fresco de la mañana, la reunión fue a las 8.30,
el funcionario evidentemente sintió calor por lo que tenía que negociar. Dejó su saco
de color crema en el asiento de la nave y se dirigió a cumplir con su misión.
Fueron 40 minutos a solas, salvo algunas pequeñas interrupciones de Martín Oyuela, uno
de los principales operadores duhaldistas y quien ya había logrado un encuentro anterior
entre los mismos protagonistas.
A primeras horas de la tarde, el duhaldismo echó a rodar su versión: Kohan le aseguró
al gobernador que el Presidente desistiría de competir como candidato, para lo cual
necesitaban tiempo a los efectos de convencer a Reutemann para que ocupe ese lugar. A
cambio, Duhalde debía suspender el plebiscito y dejar a la Alianza sola en la iniciativa.
Por su parte, el enviado del Presidente, intentando mostrar una imagen de fortaleza, dijo
que no se fue a buscar ningún acuerdo, que no se habló de la interna y menos de la
posibilidad de que Menem desista de participar en la contienda partidaria. Apenas admitió
su disgusto por ver cómo Duhalde compartía una estrategia con la Alianza.
¿De eso sólo se habló? le preguntó Página/12.
De eso y de cómo ganar el 24 de octubre fue la frase de compromiso del
funcionario.
Sin embargo, ante la insistencia de este diario, dio pistas sobre las intenciones del
menemismo de postergar nuevamente la interna, convocada para el próximo 9 de mayo.
Yo siempre dije que lo mejor es hacerla lo más cerca posible de las elecciones
generales, dijo.
Después de pasar el parte a Menem, Kohan participó ayer en la Casa Rosada de un
encuentro con el ministro del Interior, Carlos Corach, el jefe de Gabinete, Jorge
Rodríguez, y el senador Eduardo Bauzá, en donde acordaron llamar de urgencia para hoy a
una reunión del Consejo Nacional Justicialista.
La postergación sin fecha de la interna, con la que se amenazó ayer todo el día y que
hoy podría concretarse, se basará en dos impugnaciones a la Junta Electoral, sindicada
de menemista. Una de esas impugnaciones la presentó el senador duhaldista
Carlos Branda. La otra el precandidato presidencial Adolfo Rodríguez Saa. Nadie pudo
explicar ayer la presencia del gobernador de San Luis en el despacho de Corach.
Esta alternativa le daría aire a Menem, tanto para seguir peleando por su propia
candidatura como también para generar un espacio para que Reutemann tome ese lugar. Si
bien el senador santafesino se mantiene reticente a opinar sobre el tema desde Europa, sus
operadores trabajan a toda máquina para preparar el terreno de su eventual lanzamiento.
Reutemann habló desde el otro lado del océano con Antonio Cafiero, el precandidato a
gobernador bonaerense del menemismo. Ambos prometieron trabajar junto al electo gobernador
de Córdoba, José Manuel de la Sota, y el mandatario de La Pampa, Rubén Marín, para su
candidatura apenas Menem les dé el guiño. A esta altura Duhalde no duda de que tendrá
competencia, pero no precisamente de Menem. Lo ve al Lole en el horizonte pero está
convencido de que el Presidente todavía hará ruido por varias semanas más. Sin embargo,
tras el diálogo con Kohan, se mostró conforme y a la vez desconfiado. No es la primera
vez que un funcionario del Gobierno va a sus pies y al día siguiente amanece con otra
puntada reeleccionista. Es por ello que ordenó a su tropa mantener firmes las
posibilidades de implementar el plebiscito tan temido por algunos menemistas.
De todas formas algunos voceros del gobernador arriesgaron decir que, si el
Presidente abandona la locura de la re-re, que obviamente incluye los aprietes a la Corte,
es probable que se acuerde hasta una corta postergación de las internas para darles
tiempo para armar una lista. Otros, en tanto, fueron un poco más allá y manejan la
posibilidad de volver a la anterior posición de no competir en los cargos partidarios y
de esta manera permitirle al riojano proseguir como presidente del PJ. Posición que fue
ratificada por el propio Ramón Ortega al decir: El Presidente debe seguir
conduciendo el partido, de esto no tengo la menor duda.
En el entorno de Duhalde hay un disimulado optimismo, ninguno de los consultados se
atrevió a asegurar que el encuentro anticipó un futuro retiro de Menem, pero sí dejaron
entrever que de proseguir las conversaciones todo indica que puede desembocar en
esta posibilidad. Una forma elegante de anunciar el abandono de Menem a la
re-reelección.
REUTEMANN PREPARA SU REGRESO
Con la valija lista
Por Pablo Feldman
¿De dónde sacaron
que me reuní con De la Sota en París?, fue la respuesta de Carlos Reutemann a
Página/12 desde Cap Ferrat, en los acantilados del Principado de Mónaco a donde llegó
el martes para visitar a sus hijas. Yo no hablo con De la Sota desde hace mucho
tiempo, la última vez fue por teléfono y creo que fue el mes pasado, dijo el Lole
desmintiendo un encuentro que, según calificó, debe ser una operación de
prensa. Lo cierto es que luego de participar de una serie de reuniones con banqueros
en París, el martes a las 7.30 tomó el vuelo de Air France que lo depositó en el
aeropuerto de Niza donde lo esperaba su familia para pasar un par de días antes de
regresar a la Argentina. Le repito lo que le dije desde Francia: no quiero
hablar de lo que está pasando allí porque estoy a 14 mil kilómetros, se disculpó
el ex piloto de Fórmula-1 que enseguida agregó y me parece que es poco para lo que
está pasando ...
Sin embargo, dio su opinión acerca de la situación generada a partir del anuncio de la
consulta popular. En ese sentido fue cauto y ratificó la línea que viene desarrollando
desde hace tiempo: Habrá que ver qué pasa en las Cámaras con el proyecto, y
después ver si tiene viabilidad jurídica. Yo sigo pensando que para que Menem sea
candidato tiene que reformarse la Constitución, sostuvo. Reutemann negó haber
tomado contacto con ningún dirigente del menemismo y menos del duhaldismo,
ratificó que regresa el fin de semana y vaticinó que nadie sabe cómo termina
esto, el único que puede tener idea es Menem y nadie sabe en serio qué es lo que piensa
Menem, concluyó.
La versión de un encuentro en París entre Reutemann y De la Sota fue desmentida a este
diario por el senador santafesino que sostuvo que hace mucho que no hablo con De la
Sota, me dijeron que el lunes anduvo por París pero yo no lo vi, y ni siquiera hablé con
él por teléfono. El ex piloto, que estuvo participando en París de la reunión
del Banco Mundial, tomó contacto con algunos miembros del Gobierno el lunes pasado en una
cena en la embajada argentina de la que participaron, entre otros, el ministro Roque
Fernández y legisladores nacionales. Luego de eso, se embarcó a Niza y de allí, en
auto, a Mónaco. En el Principado residen sus dos hijas, junto a quienes piensa permanecer
hasta el domingo, por esa razón es que el ex piloto sostuvo que no quiero hablar
desde aquí, la semana que viene estoy de vuelta y vamos a ver cómo sigue esta historia,
además como veo que van las cosas es probable que lo que hablemos ahora mañana ya no
sirva, se disculpó. Yo tengo noticias de lo que ocurre a través de los
llamados de mis colaboradores, pero es relativo porque lo que puede pasar está en la
cabeza de Menem únicamente, sostuvo. Antes de cortar la comunicación telefónica,
el ex gobernador santafesino recordó la frase con la que graficó hace algunos meses la
disputa Menem-Duhalde: ¿Se acuerda que dije que era como un choque frontal de dos
trenes y que había que correrse para que no lo aplasten? Bueno, ahora me parece que los
pedazos van a llegar hasta aquí ..., se apuró a contestar.
El menemismo avanza en el plebiscito
vinculante
Siete diputados presentaron un proyecto para
convocar a la consulta, derogar la cláusula novena y llamar a una Asamblea Constituyente.
César Arias no lo firmó y prepara otro.
Por Adrián H. Mouján
Un sector del menemismo
presentó ayer ante la Cámara de Diputados un proyecto para convocar a una consulta
popular vinculante mediante la cual se decida si Carlos Menem puede presentarse para
competir por un tercer mandato consecutivo. El texto propone derogar la cláusula
transitoria novena, no considerar válidos los votos en blanco, convocar a una Convención
Constituyente en un plazo de 120 días después de efectuada la consulta y que los
convencionales sean elegidos por el Congreso de la Nación entre sus representantes. La
iniciativa lleva la firma de siete diputados ultramenemistas, pero entre ellas no está la
de César Arias, el operador a quien Menem encomendó la realización del proyecto. Arias
prefirió guardarse el suyo hasta hoy y no acompañar a sus pares.
¿Desea usted que Carlos Saúl Menem sea habilitado para participar como candidato a
Presidente de la Nación en las elecciones generales de 1999?, plantea en su
artículo tercero el proyecto firmado por los ultras Fernando Galmarini, Daniel Scioli,
Claudio Sebastiani, Miguel Angel Pichetto y Martha Alarcia, entre otros. Para pedir la
consulta en la que harán la pregunta del millón, los menemistas leen a su manera las
posiciones de Eduardo Duhalde, varios gobernadores justicialistas y la Alianza de convocar
a un plebiscito, y los cuestionan por considerar arbitraria la realización de
consultas en algunos distritos y no la concreción de uno a nivel nacional.
En el siguiente párrafo el proyecto propone que la pregunta debe ser respondida en
forma afirmativa o negativa, quedando entendido que la respuesta afirmativa implicará la
eliminación de la cláusula transitoria novena de la Constitución y la respuesta
negativa, su mantenimiento.
En el cuarto artículo de la presentación, en la que los ultras recurren nuevamente al
argumento de que Carlos Menem está proscripto por la cláusula transitoria novena,
Galmarini y compañía plantean que a los fines del cómputo, para determinar el
resultado de la consulta dispuesta por la presente, no serán considerados los votos
emitidos en blanco. En un anexo, los legisladores proponen declarar la necesidad de
una reforma constitucional, convocando a una Convención Constituyente, pero con la
particularidad de que esta Asamblea sólo deberá derogar la cláusula transitoria novena,
si la ciudadanía avaló en la consulta la posibilidad de permitirle a Menem postularse a
un tercer mandato.
En una violación del artículo 30 de la Carta Magna, que señala que la reforma la
realizará una Asamblea Constituyente convocada al efecto, los diputados menemistas, para
no perder tiempo, proponen que sea el Congreso de la Nación el que elegirá de
dentro de los miembros de sus Cámaras a quienes revestirían el carácter de
convencionales constituyentes. En este artículo, el cuarto del anexo, los diputados
citan el artículo 30, al que pretenden inmolar en su reclamo a una consulta.
Pero haciéndose eco de lo esgrimido por el propio Menem y los principales juristas que
fogonean la re-re, los legisladores piden que se actúe dentro de las facultades del
artículo 75, en su inciso 23. Este punto le da facultad al Congreso para
legislar y promover medidas de acción positiva que garanticen la igualdad real de
oportunidades y de trato y el pleno goce de los derechos reconocidos por esta
Constitución.... En pocas palabras, para los menemistas al redactarse la cláusula
transitoria novena se pasó por encima del Pacto de San José de Costa Rica, una lectura
que también incluye una estocada a los legisladores peronistas y aliancistas que votaron
la plena constitucionalidad de la cláusula novena.
El menemismo, en sus fundamentos, justifica esta interpretación enrevesada de la Carta
Magna al señalar que el resultado de la cláusula transitoria novena ha sido
jurídicamente disvalioso pues consagró una arbitraria y paradigmática discriminación,
no ya contra un grupodeterminado de personas, que sería malo, sino contra una sola, que
resulta aun peor.
OPINION
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