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LOS OVIEDISTAS AHORA NI SIQUIERA PUEDEN ENTRAR AL SENADO
Borrón y cuenta nueva en guaraní

Luego del nacimiento de un gobierno de coalición en Paraguay, la Justicia  electoral dijo que habrá elecciones. La unión de  fuerzas que desplazó al oviedismo será legitimada en las urnas.

El ex presidente paraguayo Raúl Cubas, ahora asilado político en Brasil, mira con ganas unas facturas.
El ingeniero y gran amigo de Lino Oviedo no tuvo ningún problema en salir a pasear por Camboriú.

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Por Pablo Rodríguez desde Asunción

t.gif (862 bytes) El nuevo gabinete paraguayo ya comenzó a ponerse el traje de gobierno. Los ministros de una coalición inédita en la historia de Paraguay empezaron a comentar en los medios los proyectos para sus respectivas áreas y varios legisladores oficialistas instaron a recuperar el tiempo perdido durante la corta gestión del ex presidente Raúl Cubas, que fue boicoteada desde el ahora oficialismo luego de la liberación del general golpista Lino Oviedo. Y para que la legitimidad del nuevo gobierno no quede en dudas, el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) ya publicó un cronograma tentativo de elecciones generales, en las cuales se presentará el actual presidente, Luis González Macchi, y un liberal -presumiblemente el ahora canciller Miguel “Tito” Saguier–, contra prácticamente ningún rival. Salvo que la Unión Nacional de Colorados Eticos (UNACE), con sus dos líderes en el exilio, pretenda para noviembre recomponerse y volver a la lucha.
“No ve ninguna diferencia con el nazismo que persiguió a los judíos para exterminarlos. Acá se quiere hacer lo mismo. Quieren meternos a todos en un campo de concentración y eso flaco favor le hace a la democracia paraguaya y a la posibilidad de una reconciliación nacional”, dijo ayer el senador oviedista y mano derecha del militar golpista, José Francisco Appleyard. Más allá de comparaciones un tanto exageradas, Asunción es desde esta semana en una ciudad completamente hostil a todo lo que connote “Oviedo”. Desaparecieron los carteles con su nombre en los parabrisas de los vehículos y varios periodistas cercanos a Oviedo y hasta legisladores del UNACE siguen siendo detenidos por “instigación a la violencia” y por haber suministrado armas durante la masacre del viernes.
El clímax de esta suerte de exilio interno que están realizando los oviedistas fue la asunción del senador suplente Alejandro Velázquez, ocurrida el martes por la noche, en reemplazo del ahora ministro de Salud, Martín Chiola. Velázquez, ex vocero de Oviedo, quiso entrar al Senado pero los múltiples intentos de linchamiento impidieron que jurara, aunque no hay ninguna razón legal para que no lo haga. “No se puede construir la democracia con odios en los corazones. Lo único que se alimenta es el revanchismo”, dijo el legislador no entrante.
El actual proceso podrá todavía ser peor para el oviedismo en caso de que se confirme la convocatoria a elecciones presentada ayer tentativamente por el director interino del Registro Electoral, Rubén Maldonado. “Se haría el 14 de mayo y de ahí en adelante se cuenta con 192 días para cumplir el cronograma como la presentación de candidaturas, fechas de impugnaciones, integración de junta electorales, impresión de boletines de votos, etc.”, explicó el funcionario. El mismo presidente González Macchi confirmó que “deben hacerse las elecciones”, algo que hasta ayer estaba en duda. “Miguel Saguier (actual canciller) sería un excelente compañero de fórmula de González Macchi”, dijo el senador del Partido Encuentro Nacional (PEN), Marcos Paz Castaing, reconociendo lo que en los nombramientos parece obvio: el único viceministro designado pertenece a la cancillería y es el liberal Carlos Mateo.
Buscando afinar lo que terminará siendo la versión oficial de la crisis institucional paraguaya, el presidente González Macchi y varios de los máximos dirigentes argañistas, como el ministro de Obras Públicas Alfredo Planás y el presidente del Partido Colorado, Bader Rachid, se ocuparon de diferenciar a Cubas de Oviedo. “Cubas no es un prófugo de la Justicia”, dijo González Macchi. Oviedo, en cambio, debe cumplir los 10 años de prisión por su intentona golpista de 1996. Sin embargo, el ex presidente ya tiene una orden de detención por delito por omisión durante la matanza del viernes. Y ahora el fiscal general Aníbal Cabrera Verón denunció “laexistencia de un plan para apoderarse de dinero del erario público” durante su gobierno.
Pero Cubas, gracias a la salida negociada en la que la dirigencia colorada tuvo mucho que ver, pasea tranquilo por Camboriú, donde veranea desde hace 15 años. Camboriú está muy cerca de la isla de Santa Catarina, donde está Florianópolis. Antiguamente era conocida como “Isla de Nuestra Señora del Destierro”.

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