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La obsesión
de los financistas extranjeros
¿La
Argentina devaluará?
Pese al esfuerzo
de la Alianza y el PJ de convencer a Wall Street
de que no se quebrará la paridad 1 a 1 con el nuevo gobierno, los
inversores del exterior dudan. Apuestan a que habrá devaluación.
Por Claudio
Zlotnik
Ya no me preguntan si
la Argentina va a devaluar. Ahora, directamente, quieren saber en qué
momento será la devaluación. Recién llegado
de un viaje a Europa, Martín Redrado confesó que los financistas
lo ametrallaron con la misma pregunta. Otros consultores de la city también
admiten que en los últimos días notaron un aumento en la
cantidad de llamadas telefónicas desde Wall Street. Y que el motivo
de esas comunicaciones remite a una única cuestión: si es
cierto que la Argentina va a salir de la paridad uno a uno entre el peso
y el dólar antes de fin de año.
Al menos entre los financistas extranjeros, el fantasma de la devaluación
es recurrente, y es más potente a medida que se acerca la fecha
de las elecciones. Después de los golpes que los inversores recibieron
con la crisis del sudeste asiático, la caída de la economía
rusa y la devaluación en Brasil, no quieren que nada los sorprenda.
Descreen de las declaraciones contundentes del Fondo Monetario, y de las
que dejaron los economistas de la Alianza por Washington. Curados de espanto,
los financistas suponen que existe una verdad oculta. Y que el próximo
inquilino de la Casa Rosada no va a poder mantener la paridad cambiaria.
Al respecto, los inversores estadounidenses y europeos sacan sus propias
conclusiones. Para ellos, la economía argentina tiene varios problemas
estructurales, y no alcanza con tener la firme decisión política
de mantener la paridad. A saber:
1. Falta de competitividad. Para los inversores ésta es la principal
restricción de la Argentina tras las devaluaciones en cadena y
exitosas que se dieron en los países latinoamericanos. No
pierden de vista, además, que las exportaciones están estancadas.
2. El peso de la deuda. En el año 2000 el país debe afrontar
vencimientos por más de 20 mil millones de dólares y persisten
dudas sobre la capacidad de cumplimiento.
Tampoco les pasó por alto una encuesta difundida por Reuters. En
ella se daba cuenta de que, en un reciente encuentro de financistas en
un lujoso rascacielos de Wall Street, tres de cada cuatro inversores opinaron
que la Argentina va a devaluar.
En la city sostienen que el equipo económico de la Alianza estará
obligado a recorrer los centros financieros mundiales para convencer a
los inversores de que es posible sostener la convertibilidad, no bien
finalice el recuento de los sufragios emitidos el domingo 24. En ese sentido,
no son pocos los que recuerdan el maratón internacional de Domingo
Cavallo durante la crisis del tequila persuadiendo a los financistas de
que la Argentina no era igual a México. A José Luis Machinea
ya lo esperan con los brazos abiertos.
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