Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira


TARJETA ROJA A LA RIOJA, A LA PROMOCION EN PROVINCIAS Y A LAS PENSIONES GRACIABLES
Yo voto, tú votas, él veta el Presupuesto

Fernando de la Rúa vetó tres artículos del Presupuesto del 2000 como forma de presionar al Congreso para acelerar la aprobación de la Emergencia Fiscal. La negociación es política más que económica. Desde el Palacio de Hacienda se asegura que La Rioja recibirá 145 millones y que habrá una nueva promoción.

na03fo01.jpg (12226 bytes)
Fernando de la Rúa junto a legisladores de la Alianza.
Se recortan en 5 millones las pensiones graciables para este año.


Por David Cufré

t.gif (862 bytes) Fernando de la Rúa decidió hacer algo más que pedirles a los legisladores que no se tomen vacaciones. Sacudió el tablero político con una jugada arriesgada. Vetó tres artículos del Presupuesto que habían sido motivo de arduas negociaciones entre la Alianza y el justicialismo, cuando el proyecto se trató en el Congreso. A través de esa resolución, el Poder Ejecutivo canceló el envío de una ayuda especial a La Rioja por 250 millones de pesos anuales. Suprimió el aumento de los diferimientos impositivos –régimen de promoción agropecuaria– en favor de 14 provincias. Y eliminó la prórroga por diez años a las pensiones graciables otorgadas por diputados y senadores. El decreto con los vetos es acompañado por la firma de todos los ministros, hecho altamente inusual, en una demostración de fuerza del Ejecutivo. De la Rúa se plantó ante los legisladores, propios y extraños, procurando reafirmar su poder. Lo hizo para templar los músculos del Gobierno antes de pulsear con el Congreso por la sanción de la ley de emergencia fiscal y con los gobernadores por el ajuste del gasto público en las pro-vincias.
Al mismo tiempo, De la Rúa aprovechó para establecer claras diferencias con su antecesor, al anular una de las medidas que Carlos Menem tomó a días de dejar el poder. Específicamente, canceló la ratificación por ley del decreto emitido por el anterior gobierno que garantizaba a La Rioja una asignación anual indefinida de 250 millones de pesos. El Presidente pretende cortar de cuajo con las prebendas que durante años disfrutó la provincia natal de Menem, en lo que constituyó uno de los símbolos de su gestión. De todos modos, La Rioja recibirá este año 145 millones de pesos adicionales a lo que le corresponde por la coparticipación de impuestos. Esa partida fue incluida en el Presupuesto. Y el Gobierno la mantendrá porque reconoce que la provincia podría sufrir una aguda crisis social si deja de recibir la ayuda de la Nación de un día para el otro.
“No hay razón para darle rango de ley al decreto que asignaba 250 millones anuales a La Rioja. Esto no quiere decir que no se vayan a respetar algunos acuerdos, como el giro de 145 millones este año. Pero la ayuda no puede ser indefinida. En todo caso, habrá que analizar cada año cuál es la situación de la provincia”, indicó a Página/12 el secretario de Hacienda, Mario Vicens. “También sabemos que la provincia venía recibiendo una enorme cantidad de recursos, y que podría entrar en crisis si se queda sin la totalidad de esos fondos en un solo año. Es preciso establecer una transición hasta que podamos acordar con La Rioja mecanismos eficientes y transparentes de su administración”, añadió el funcio- nario.
Otro de los vetos del Ejecutivo al Presupuesto recae sobre las pensiones graciables que conceden diputados y senadores. En rigor, el veto es a la prórroga automática por diez años de los beneficios que caducan este año. El monto de esas pensiones es de 5 millones de pesos, que podrán ser cubiertos por los legisladores con otros fondos, ya que se mantuvo la partida de 25 millones para conceder la ayuda económica a particulares. Pero al suprimir la prórroga, año tras año el stock de pensiones se irá reduciendo. En la actualidad, alcanza a 312 millones de pesos, de los cuales caen 5 millones este año.
“Son decisiones muy equilibradas, muy razonables, y no veo razones que justifiquen un eventual rechazo del Parlamento”, expresó Vicens, anticipándose al probable revuelo político que podría derivar en una insistencia del Congreso al proyecto votado por ambas cámaras. “El tema que puede parecer más delicado es la eliminación del aumento de los diferimientos impositivos, pero en el decreto aclaramos que en el transcurso de 180 días el Ejecutivo enviará al Congreso un nuevo proyecto de promoción”, añadió el funcionario. En efecto, eso es lo que puntualiza el Gobierno en los considerandos del veto. Pero la trascendencia política de la medida es que el Ejecutivo desconoce acuerdos previos de legisladores de la Alianza con el justicialismo. Y que el Gobierno tendráuna nueva arma para afrontar la negociación con los gobernadores, en momentos en que presiona por un mayor ajuste fiscal en los distritos del interior, en respuesta a una exigencia planteada por el FMI.
El proyecto de Presupuesto estuvo a punto de naufragar en Diputados por la eliminación de la promoción industrial. Cuando los legisladores de la oposición amenazaban con retirarse del recinto, se llegó a un acuerdo por el cual efectivamente se dejaron sin efecto nuevos cupos de promoción industrial, pero se incorporaron autorizaciones a 14 provincias para elevar el monto de diferimientos impositivos de proyectos agropecuarios. Fue por un total de 300 millones de pesos. Ahora el Ejecutivo suprimió esos nuevos cupos.
“El régimen de diferimientos impositivos se ha caracterizado por su falta de transparencia y eficacia. Entendemos que hay provincias que merecen una promoción especial.
Pero no mediante el mecanismo de autorizar a las empresas que se radiquen en ellas a dejar de pagar impuestos, sino a través de apoyo financiero u otras alternativas que deberán estudiarse”, señaló Vicens. En consecuencia, cada provincia deberá sentarse a negociar con el Gobierno, en lugar de disfrutar automáticamente de los diferimientos impositivos. Y en ese diálogo el Ejecutivo incorporará otras cuestiones, entre las cuales la principal es el gasto público de las provincias.

 


PAGINA/12 ACCEDIO A LA ULTIMA VERSION DE LA INICIATIVA
La reforma laboral llega al Congreso

Por Diego Schurman

t.gif (862 bytes) El Gobierno enviará esta semana al Congreso un proyecto de reforma laboral que extiende de uno a seis meses el período de prueba de un trabajador y obliga a sindicalistas y empresarios a renovar los convenios colectivos cada dos años. El justicialismo y la CGT anticiparon su rechazo a la propuesta a cuya última versión accedió Página/12.
Alberto Flamarique continuó ayer con los retoques del proyecto que podría ingresar mañana a la Cámara de Diputados. El ministro de Trabajo contó con el asesoramiento de funcionarios de su cartera, entre ellos el viceministro Jorge Sappia.
Flamarique buscó consenso en los últimos días entre distintos sectores de poder. En la carta de presentación intentó ganar la primera batalla: eliminó de su vocabulario la palabra “flexibilización” y la reemplazó por “modernización”. Al fin, un eufemismo que también utilizó Carlos Menem en sus reiterados intentos por modificar las normas laborales.
Los principales puntos de la iniciativa, que de todos modos es notoriamente más light que las impulsadas durante la gestión menemista, son los siguientes:
ron2.gif (93 bytes) Período de prueba. Se extiende de uno a seis meses con opción a una renovación por otros seis meses más. Durante ese período el empleador deberá afrontar todas las contribuciones a la seguridad social, aunque no tendrá costo de indemnización por despido.
En caso de efectivizar al trabajador, el empleador obtendrá una rebaja de las cargas sociales de ese trabajador del 18 al 12 por ciento. Ese beneficio sólo se pondrá en práctica si simultáneamente no produce despidos en la empresa. Aún se estudia si incluir multas a aquellas firmas que abusen del período de prueba para la rotación constante de trabajadores.
Los críticos de esta reforma aseguran que es “excesivo” probar entre seis meses y un año a una persona para saber si, por ejemplo, es apto para ser mecánico o empleado de un comercio. En la misma Alianza aseguran que durante su tratamiento los seis meses podrían reducirse a tres.
ron2.gif (93 bytes) Contribuciones patronales. Además de la reducción de las contribuciones patronales por cada trabajador que luego de realizar el período de prueba sea efectivizado, se prevén rebajas graduales para el resto de la plantilla, siempre y cuando no se produzcan despidos, El objetivo es que, una vez superada la emergencia fiscal, de las actuales contribuciones del 18 por ciento se llegue en el 2003 al 12 por ciento.
ron2.gif (93 bytes) Convenios colectivos. Obliga a renovar los convenios colectivos cada dos años. En la actualidad, de no haber acuerdo de partes sobre el contenido de la renovación, el convenio mantiene su vigencia en forma indefinida (ultraactividad).
Con el proyecto, de no haber acuerdo entre sindicalistas y empresarios una Oficina de Mediación y Arbitraje, independiente de la administración central e integrada por “notables”, dirimirá y se fijará un nuevo convenio. Para la elección de los “notables” podría haber consultas con el Consejo de la Magistratura.
ron2.gif (93 bytes) Ambito de negociación. Descentraliza la negociación colectiva para que se pueda negociar en ámbitos inferiores al de la actividad, ya sea por empresa, grupos económicos, conglomerados, áreas territoriales, ramas o articuladas. En todos los casos el sindicato madre deberá rubricar los acuerdos. La Oficina de Mediación y Arbitraje también tendrá la potestad de resolver conflictos asociados a la elección del ámbito de la negociación.
ron2.gif (93 bytes) Registración. Simplifica los trámites de registración. Habrá un formulario único por empresa por trabajador y ninguna institución de la administración del trabajo a la seguridad social, pública o privada, podrásolicitar los datos. La idea es abaratar los costos de entrada de los contratos laborales.


La resistencia de la oposición

Por D.S.

“Si no le aprobamos este tipo de reformas a nuestro gobierno menos se la vamos a aprobar a la Alianza.” La diputada Graciela Caamaño dejó sentada ayer la postura que mantendrá el justicialismo a la hora de analizar la reforma laboral del Gobierno.
Caamaño, integrante de la Comisión de Legislación Laboral de la Cámara baja, apuntó específicamente contra el período de prueba, al que consideró como una forma de “explotar” a los trabajadores.
Durante la gestión de Carlos Menem, la CGT consiguió una reforma laboral que eliminó la mayoría de los llamados “contratos basura”, rótulo que también le valió al período de prueba, pese a ser justamente uno de los pocos que se mantuvo firme.
La embestida contra el proyecto de flexibilización contó con adhesiones previsibles. Entre ellas la del titular de la CGT, Rodolfo Daer, quien dijo a Página/12 que en el país “no hace falta ninguna nueva reforma laboral”.

Claves

ron2.gif (93 bytes) Fernando de la Rúa vetó tres artículos del Presupuesto del 2000.
ron2.gif (93 bytes) Se refieren a las pensiones graciables que otorgan los legisladores, al dinero que gira la Nación a La Rioja y a los diferimientos impositivos para promoción en provincias.
ron2.gif (93 bytes) Esa iniciativa forma parte de la presión que quiere imponer el Gobierno para que el Congreso apruebe la ley de emergencia fiscal.
ron2.gif (93 bytes) La negociación será política más que económica.
ron2.gif (93 bytes) Economía ya se comprometió a enviar a La Rioja 145 millones de pesos por año, pero evita con el veto que el decreto que establecía el giro en forma permanente quedara como ley.
ron2.gif (93 bytes) También enviará al Congreso un nuevo proyecto de promoción para definir con subsidios explícitos el beneficio para las empresas promocionadas.
ron2.gif (93 bytes) El capítulo de la reforma laboral, uno de los más polémicos, ya estaría consensuado entre el Gobierno y los legisladores de la Alianza.
ron2.gif (93 bytes) El PJ adelantó que se opondrá a la emergencia fiscal.
ron2.gif (93 bytes) El capítulo previsional también es resistido por los diputados de la Alianza.


Fuego cruzado entre el PJ y la Alianza

Jorge Yoma, senador del PJ.

“Es revanchismo”
na03fo02.jpg (7822 bytes)
“El recorte de 150 millones de pesos a la provincia de La Rioja es un acto más de persecución política y revanchismo por parte del gobierno nacional. El resentimiento político que le tiene la Alianza al ex presidente Carlos Menem se lo pretende hacer pagar al pueblo de La Rioja. El presidente Fernando de la Rúa violó todos los acuerdos que hubo. También incumplió la palabra que dio en la campaña electoral a la gente de la provincia. Vamos a esperar que el gobierno nacional trate de reestablecer la tranquilidad al pueblo de La Rioja, pero la decisión es a todas luces lamentable y habla de la incoherencia de la Alianza. Qué casualidad que se hayan metido con la provincia de La Rioja, transmitiendo angustia y zozobra a la gente. Eso sí: antes del veto, nos pidieron el voto a libro cerrado del Presupuesto. Nos pidieron también que votemos el Pacto Fiscal. Lo que han hecho es lisa y llanamente lamentable.”
Leopoldo Moreau, de la Alianza.

“Abrir el debate”na02fo03.jpg (5635 bytes)
“Creo que el presidente Fernando de la Rúa tiene que hacer lo que crea conveniente para el país. En primer lugar, hay que tener en cuenta que no se están eliminando las pensiones graciables. Lo que se vetó fue la renovación automática cada diez años de esas pensiones, que estaba sumando una masa de dinero increíble. En cuanto a los diferimientos impositivos, creo que los regímenes deben existir, pero creo también que deberían ser más transparentes de lo que han sido hasta ahora. A partir del veto, se va a abrir un debate sobre el tema. Por último, los 150 millones de pesos que el ex presidente Menem había destinado a la provincia de La Rioja constituían un privilegio inaceptable. Menem no tenía por qué firmar ese decreto, aunque su provincia natal necesitara dinero. Con ese criterio, tendría que haber aumentado la suma destinada a Corrientes o a Tierra del Fuego.”


La Ley de Emergencia Fiscal entra en una zona de mucha turbulencia

PRINCIPAL