OPINION

LA PROTECCION DEL PATRIMONIO FUTURO
La autopista es necesaria

Sigue la polémica en torno al proyecto de construcción de la Autopista Ribereña en la ciudad de Buenos Aires. Desde otro enfoque, el autor de esta nota resalta el protagonismo de la arquitectura en toda obra urbana de envergadura y llama la atención sobre el patrimonio futuro.

Por el Arq. Martín Renom *

Es necesario construir la autopista que une la Arturo Illia con la que sale a La Plata, para que así se comience a ordenar el tránsito en la ciudad de Buenos Aires. Hace muchos años que esto está demorado, y los trastornos que trae son fácilmente detectables, viendo lo que pasa en avenida Madero. Las autoridades, luego de muchos años y de consensuar con distintos sectores, eligieron una traza. Aceptemos la decisión como buena, no perdamos más tiempo y, a partir de entonces, analicemos las posibilidades para que la decisión sea positiva.

En el equipo que defina el proyecto tiene que estar presente la arquitectura. Porque va a ser esa disciplina la que va a encontrar las mejores soluciones para la traza elegida. Es importante que la conexión de la ciudad con Puerto Madero sea fluida. Habrá que atemperar los aspectos negativos que trae aparejados la construcción de una autopista y preservar el hábitat del vecindario, utilizando los elementos que la arquitectura puede ofrecer: puentes, pequeños boulevares, terraplenes, forestación, iluminación, que pueden aportar un resultado funcional y bello. Así, se podrán proporcionar espacios de belleza que quizás se transformen en un lugar característico de Buenos Aires. Al mismo tiempo, demostrar cómo un problema puede ser resuelto positivamente.

No es lo mismo que la autopista tenga un buen diseño a que no lo tenga. La ciudad no puede aceptar un cruce como el de Libertador y la autopista Illia como un tema exclusivamente vial, como está resuelto. Ese segmento debería haber tenido una solución estética: no se pensó como puente, y los puentes, en arquitectura, siempre han sido un motivo de belleza. Aquí, afortunadamente, en Puerto Madero, se ha recurrido al arquitecto Calatrava, que ha diseñado un puente peatonal, que va a ser de por sí un hito de la ciudad, esos hitos de arte en los que la arquitectura y el arquitecto son protagonistas.

Buenos Aires necesita de proyectos para integrar la arquitectura. Tiene que convertirse en la capital cultural del Mercosur. Lo hará en tanto y en cuanto tenga proyectos que sepan “vender” a la ciudad. En el mundo hay ejemplos maravillosos: París es uno de ellos. Miterrand opinaba sobre la arquitectura de los proyectos parisinos, por la importancia cultural y política del tema. Desearíamos que en Buenos Aires, la arquitectura tuviera ese nivel. Necesitamos grandes proyectos: o el aeropuerto sobre el río, o un museo de la música, o un museo del fútbol interactivo, ya que se relaciona a la Argentina con ese deporte. Concretar el proyecto Retiro, con la misma vocación que en Berlín desarrollan la Postdamer Platz, un gran centro de congresos, un auditorio y muchos más. Esto va a tener repercusión en el turismo, que se ha incrementado entre tres y cuatro veces en los últimos años. No puede ser que la ciudad crezca a pesar nuestro, por desarrollos espontáneos y esporádicos, sino que tiene que hacerlo con un plan de marketing. Y la arquitectura tiene que ser protagonista. Porque la arquitectura es protagonista en el compromiso del ciudadano con su ciudad.

En cuanto al ordenamiento del tránsito, tema que es tan importante, se deben revertir las prioridades. Durante muchos años se pensó en otorgar facilidades para la circulación del automóvil. Es el momento de pensar en la gente. Quiere decir que el peatón tiene que tomar el protagonismo, como se ha hecho en otras partes del mundo. Es maravilloso encontrarse en los sectores peatonales de Viena, Munich, ciudades que hace muchos años tienen zonas en las que el peatón se encuentra aislado del ruido y del vértigo del transito vehicular. Se ha bajado el umbral sonoro, y uno disfruta la ciudad. El tránsito debe organizarse para favorecer a la gente, que es la verdadera protagonista. El tema es ganar la ciudad para el peatón, el habitante de la ciudad. Y las autoridades deben ocuparse de esto.

Hoy está afortunadamente de moda la conservación del patrimonio arquitectónico. Hay que poner de moda la creación del futuro patrimonio y esto se obtiene reafirmando a la arquitectura como protagonista.

* Presidente del Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo y titular del Estudio Urgell-Fazio-Penedo-Urgell.