Prioridades
en la vida de Lemmy
Mujeres,
whisky, mujeres...
P.P.
Entre
su colección de objetos nazis, Ian Lemmy Kilmister atesora un viejo
papel manuscrito que le regaló Ozzy Osbourne. “Feliz Navidad y Año Nuevo”,
dice la nota y abajo se lee la firma: “Adolf Hitler”. He aquí los placeres
privados y públicos del héroe de Motörhead: mujeres, whisky y una colección
de medallas, diplomas, relojes, cuchillos, banderas y autógrafos del
Tercer Reich. En la habitación de un hotel en Belo Horizonte, Brasil,
Lemmy habla con el No, se aclara la garganta y responde antes que le
pregunten lo inevitable: “¿Sos nazi?”. “Por supuesto que no soy nazi,
man. Por supuesto que no, carajo. ¡Mierda! Estoy en una banda de rock
and roll, ¿sabés? Tres o cuatro de mis novias son negras. Colecciono
estas cosas porque se ven bien, no porque coincida con sus ideas ni
crea que los nazis eran buena gente”. –¿Y dónde las conseguís? –Las
voy comprando. Incluso tengo algunas que compré en Buenos Aires. Del
partido nazi argentino (sic). Un par de medallas que me compré en un
local de la ciudad, de cosas pertenecientes a alemanes asentados en
Argentina... No entiendo cómo alguien puede imaginar que soy nazi. Cómo
mierda. No me entra. Que colecciones estampillas no quiere decir que
trabajes en el correo. –¿Algún otro hobby que hayas mantenido oculto?
–No, sólo mujeres. Me siguen gustando las mismas cosas de siempre: mujeres,
whisky... Sigo disfrutando mucho de las mujeres. Y el whisky sigue siendo
el mejor trago. Pero que no sea Scotch, ¿eh? Bourbon, ¿ok? Bourbon.
–¿Y Motörhead? –A 25 años de haber empezado, estamos mejor que nunca.
No me interesa lo que crean los demás. A mí sólo me importa Motörhead.
Y las mujeres. Y el whisky.
Los Gallagher
festejaron el ascenso del Manchester City
Allá vamos, United
R.C.
El fin de semana
pasado el consumo de cerveza en México debe haber crecido considerablemente.
¿Por qué? Bueno, con sólo mencionar que Oasis tocó en el Palacio de
los Deportes del DF debería alcanzar como respuesta. Pero hay un detalle
más: los Barros Schelotto del rock inglés estaban de humor para el
festejo. Su equipo de toda la vida, el Manchester City, ascendió –salió
segundo, detrás del Charlton– a la Premier League, la primera-primera
división del fútbol inglés, en donde volverán a cruzarse con sus vecinos
ricos y famosos del United. Para darse una idea del fanatismo de los
Gallagher, hay que recordar que, hace algunos años, ofrecieron ser
sponsors del club para salvarlo de los problemas financieros. El domingo,
Noel siguió todo el partido por teléfono: llamó a un amigo y le pidió
que pegara una radio al auricular. Liam, en cambio, tuvo que soportar
la ansiedad siguiendo sucesivos e-mails enviados por su hermano Paul
(el gordo). Los Gallagher deben haber querido depilarse las cejas
al final del primer tiempo, porque el Man City perdía 1-0. Pero en
el segundo, los azules volvieron como una tromba y dieron vuelta el
resultado en veinte minutos: el empate fue del goleador Shaun Goater
(23 tantos en 40 partidos) y aumentaron Dailly (en contra), Mark Kennedy
y Paul Dickov. El 4 a 1 final hizo saltar las tapitas de cerveza...
En ambos lados del Atlántico.
A
propósito, Oasis parece que estará por Argentina en agosto. Bienvenidos
otra vez, hooligans.
Largo
es el otoño
con el Sr. Gillespi
Curiosidades
de nuestro tiempo
LOS DIENTES
Antiguamente, los dientes eran pequeños huesitos blancos que un día
asomaban sus puntas por entre las encías... y que a lo largo de la vida
se iban transformando en unos simpáticos muñequitos amarillentos con
agujeros marrones, hasta que sorpresivamente terminaban clavados a un
pedazo de carne o, simplemente, los tragábamos durante las noches. En
la actualidad, los dientes (gracias al avance de la ciencia y los cientos
de miles de productos) son elementos efímeros que se van transformando
en polvo. Este proceso lleva algunos años, y un buen día nos damos cuenta
de que todos nuestros dientes fueron reemplazados por piezas similares
de material plástico. El trabajo del dentista es cambiar los dientes
en forma gradual, sin que notemos la diferencia (a no ser por la fortuna
que nos cuesta). Para este fin utilizan aparatos (martillos neumáticos)
similares a los que usan los obreros que rompen el asfalto, pero en
miniatura. Los dientes del polvo vienen y al polvo vuelven.
LA VISTA
Quizás los ojos son lo más maravilloso que nos dio el Creador, aunque
también debo decir que, como los dientes, sufren algunas transformaciones.
La mayoría de la gente goza de una excelente vista a lo largo de su
juventud (excepto yo, que acarreo anteojos desde temprana edad, lo que
me llevó a convertirme en el primer arquero que atajaba la pelota y
los anteojos al mismo tiempo).
CALVICIE
Se trata de uno de los grandes fantasmas de todos los hombres, al cual
sólo le dan gran importancia los pelados (y las parejas que los tienen
que soportar). La caída del pelo es algo totalmente natural, y hay que
tomarlo como tal. Ridículo resulta tratar de disimularlo, quizás para
mí es fácil porque hasta el momento no he perdido una gran cantidad
de pelo, pero convengamos en que es mucho más digno lucir la pelada
que nos tocó en suerte que tratar de disimularla a toda costa. Hay pelados
a los cuales la calvicie les sienta muy bien, los hace viriles, masculinos
y atractivos. Ejemplos: el Indio Solari, el Tano Jacuvobich, y alguno
que otro más (necesitaría un par de días para encontrar otro ejemplo).
NO al uso de la CORTINA (es decir, dejar crecer el pelo desmesuradamente
de un costado para tapar toda la bocha), cualquier brisa te puede dejar
muy mal parado. NO al uso de PELUCAS y/o BISONES, jamás coinciden con
el color de su pelo original. Es más, yo creo que los que venden estas
cosas inconscientemente desean que todos se den cuenta de que tenés
un peluquín. Actualmente, no hay peluquín que no pueda ser identificado
a menos de 150 metros.