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Jueves 9 de Noviembre de 2000

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tapa del No

Moby, estrella del momento, dice que taaaanto no ha cambiado su vida...

“Es un poco más interesante”

¿Habrá que creerle? El hombre detrás de los mejores collages gospel-dance de los últimos tiempos habla aquí de su amor por toda la música. También de sus parientes argentinos y del bueno de Axl Rose. Por si fuera poco, te invitamos a conocer al hombre detrás de este hombre.

TEXTOS ROQUE CASCIERO

El 13 de abril de este año, la tapa de este suplemento era para un muchacho que, con cara de angustiado, se mordía la remera. La volanta decía: “Es el productor y remezclador estrella del rock del siglo XXI. Sacó el mejor disco del año pasado, conquistó las pistas de baile de Europa y Estados Unidos y, en la Argentina, pocos saben de su existencia. ¿Conocen a este hombre?”. Ese hombre era Moby. Después, su obra cumbre Play comenzó a sonar en las radios y llegó a vender 15.000 copias en Argentina (en todo el mundo lleva facturadas 5 millones y medio) aunque, más que eso, logró ubicar varias de sus exquisitas canciones como banda de sonido de programitas, programotes y publicidades televisivas convirtiéndose, tal como sucedió con Fatboy Slim en el ‘99, en “carne de musicalización”. Ahora, puede inferirse, sí se sabe quién es este hombre.
Moby eligió llamarse Moby porque desciende de Herman Melville, el autor de Moby Dick. Es vegano (no come ningún producto de origen animal), tiene creencias cristianas aunque no pertenece a ninguna religión, escribe ensayos breves sobre sus puntos de vista en los libritos de sus CDs, y su eclecticismo lo ha hecho grabar desde instrumentales para bandas sonoras hasta punk rock. A propósito de una edición limitada de Play –con un disco extra de lados B (ver recuadro)–, Moby habló con el No de su momento de gracia. La estrella que se atrevió a mezclar dance y gospel contesta en forma breve y rápida. ¿Querrá conseguir en sus entrevistas la velocidad de “Thousand”, su tema que entró en el Libro Guinness de los Records por contener mil beats por minuto?
–Antes de Play eras una figura respetada en el mundo de la música, pero ese álbum te convirtió en una estrella mundial. ¿Es el estrellato lo que imaginabas?
–Go, el primer disco que hice hace diez años, fue exitoso en toda Europa. Eso sí representó un cambio más profundo en mi vida. Cualquier clase de estrellato que tenga ahora no es tan diferente de cómo era mi vida hace uno o dos años. No sé, ahora me invitan a más fiestas.
–Sin embargo, confesaste que cuando ibas a las fiestas del ambiente de la música, todos te miraban como si no pertenecieras a ese círculo, pero ahora sí te aceptan...
–Sí, es verdad, ahora mi vida es un poco más interesante y todo eso. Pero lo mejor de tener un disco exitoso es saber que hay gente a la que le gusta escuchar mi música.
–Play tiene canciones con samples de gospel y blues sobre bases de hip hop, instrumentales melancólicos y temas dance. ¿Cómo hiciste para que el álbum tenga cohesión?
–Supongo que tiene que ver con el hecho de que me gusta que los discos suenen así, aunque deba pasar más tiempo armándolos. Mientras crecía, todos mis álbumes favoritos eran maravillosos trabajos con mucha cohesión: What’s going on, de Marvin Gaye, el primero de Roxy Music, Closer de Joy Division, el primero de los Clash...
–Tus primeros pasos en el mundo de la música fueron dentro del campo clásico y más tarde con el punk rock. ¿Cómo fue que te interesaste por el dance?
–Creo que, en realidad, siempre me atrajo la música en general. Desde que era muy chico, todas mis personas favoritas eran músicos y me encantaba escuchar música, así que era bastante lógico que pasara el tiempo aprendiendo a tocar.
–¿Fuiste vendedor en una disquería?
–Sí, estuve ahí un año. Apenas abandoné la universidad, me conseguí un trabajo en la disquería de mi ciudad, donde trabajaba cuatro o cinco días por semana.
–¿Tu trabajo era parecido a lo que se ve en la película Alta fidelidad?
–Bastante, sí, excepto porque el tipo para el que trabajaba era un viejo hippie alcohólico, así que la cosa no era tan cool. No había tanto material contracultural como en la disquería de la película. Más bien se trataba de piratas de Grateful Dead o The Band.
–¿Qué artistas son, para vos, excitantes en la escena actual?
–Me gustan casi todos los estilos: el R&B, el hip hop, el house, el punk, la música alternativa, el post rock... Creo que se están haciendo muchos discos buenísimos.
–¿Por ejemplo?
–Los de Mercury Rev, Grandaddy, Trans Am, cosas así.
–¿Escuchaste el nuevo disco de Fatboy Slim?
–Sólo escuché una canción y me sonó totalmente pasada de moda. No recuerdo el nombre, pero parecía un lado B de Fatboy Slim de hace tres años.
–En una nota decías que sólo remixabas canciones que te gustaban. Aphex Twin tiene el criterio contrario: dice que, si un tema le agrada, no necesita poner sus manos sobre él. ¿Qué opinás sobre
esa postura?
–La verdad, no sé qué decir. Por el momento no estoy haciendo remixes; estoy muy ocupado con la gira. Pero sostengo que nunca trabajaría con material de una banda que no me gusta.
–¿Por eso rechazaste producir el nuevo disco de Guns N’Roses?
–No, la razón principal por la que no quise trabajar con Axl fue porque, si tengo poco tiempo para trabajar en la música, prefiero hacerlo con la mía. Además, no sé si él alguna vez hará ese famoso disco. Está trabajando en eso desde hace cuatro años y no se conoce demasiado progreso. Lo que escuché sonaba muy bien, pero...

Aluvión discográfico

La salida de la edición limitada de Play con un disco de lados B se parece bastante a una jugada del sello Mute para exprimir al máximo una vaca lechera. Moby lo ve de otro modo: “Algunos de los lados B son buenos y me pareció bien que estén disponibles en caso de que la gente quiera comprarlos”. Los temas que incluye el disco extra son “Flower”, “Sunday”, “Memory gospel”, “Whispering wind”, “Summer”, “Spirit”, “Flying foxes”, “Sunspot”, “Flying over the dateline”, “Running” y “The sun never stops setting”. “Para elegir qué canciones formarán parte de un disco o serán lados B no sigo un patrón fijo. Tiene mucho que ver con mis sentimientos hacia cada tema, es algo muy personal”, afirma. El éxito de Moby en todo el mundo también ha provocado que su sello anterior publicara Songs 1993/1998, una recopilación con los trabajos anteriores de la nueva estrella. Y que en la Argentina se hayan editado cinco singles con temas de Play, algo completamente inusual en el mercado local. Todo quieren beber...

 

Fan de Subiela

En cada entrevista con un medio argentino, Moby menciona que tiene un pariente que se crió en Buenos Aires y que fue quien lo introdujo en la lectura de Borges. “Lamentablemente, no me pasó música argentina, así que no conozco nada. De todos modos, entre mis cosas favoritas hay dos que vienen de la Argentina. Uno es el grupo De La Guarda: los vi en Nueva York y me pareció muy impactante. Y el otro es una película... ¿Cómo se llamaba? Ah, sí, Hombre mirando al sudeste. La vi hace mucho tiempo, mientras crecía en Connecticut, y tuvo un efecto muy poderoso sobre mí”.

 

Buscador

Varios tracks de Play partieron de grabaciones que el historiador y documentador Alan Lomax realizó en los años 30 y 40 en el sur de Estados Unidos. Lomax es reconocido como el principal preservador de la música folk norteamericana: fue el primero en grabar a leyendas como Woody Guthrie (influencia capital en Bob Dylan) y al blusero Muddy Waters (de una canción suya tomaron el nombre los Rolling Stones, pero fue mucho más que eso). Con un grabador precario que había pagado la biblioteca del Congreso estadounidense, Lomax grababa el canto del pueblo en prisiones o iglesias. “Si él estuviera haciendo grabaciones hoy en día, no sé muy bien a qué se dedicaría, porque esa música folklórica e indígena ha desaparecido. Quizás estaría viajando alrededor del mundo, al sudeste asiático...”, imagina Moby. Algunos de los samples que usó el músico fueron extraídos de grabaciones de Lomax incluidas en la caja Sounds of South. Son los que tienen las voces de Bessie Jones (“Honey”), Joe Lee’s Rock (“Find my baby”) y el Shining Light Gospel Choir (“Why does my heart feel so bad?”).