El Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) publicó este jueves una resolución a través de la cual dio inicio formalmente al procedimiento de adecuación transitoria de tarifas. El objetivo oficial es establecer un esquema provisorio hasta que se arribe a un acuerdo definitivo con las prestarías del servicio de transporte y distribución. Todavía no hay precisiones sobre la fecha en que entrarán en vigencia los nuevos cuadros tarifarios.
En los considerandos de la resolución 16/21, publicada en el Boletín Oficial, se recuerda que el pasado 16 de diciembre el Poder Ejecutivo resolvió a través del decreto 1020/20 el inicio de la renegociación de la Revisión Tarifaria Integral (RTI) vigente.
La última RTI se aprobó durante el gobierno de Mauricio Macri, pero en julio del año pasado el ENRE elevó un informe recomendado su anulación. El informe que elaboró el ente, entonces a cargo de Federico Basualdo, en el marco de las facultades de la Ley 27.541 y el Decreto 277/2020, concluyó que en la RTI "los ingresos extraordinarios reconocidos para las empresas se determinaron de forma poco transparente, se tradujeron en tarifas exorbitantes, y se omitieron los procesos administrativos internos del ente regulador".
La RTI dejó de cumplirse durante el gobierno de Macri quien no autorizó el aumento previsto para el segundo semestre de 2019. "Queda en evidencia, entre otras cosas, que lo establecido por la RTI tuvo que ser modificado desde el inicio por el gobierno de Cambiemos en tanto su aplicación efectiva resultó insostenible por sus efectos nocivos sobre los ingresos de los usuarios y de los sectores productivos", sostuvo el informe. En base a los fundamentos ofrecidos por la auditoría del ENRE, el gobierno avanzará ahora en la negociación de nuevas condiciones de prestación de servicio con las distribuidoras del AMBA, adaptado a las nuevas condiciones económicas y a otros objetivos políticos, en materia de justicia tarifaria y accesibilidad a los servicios.
El artículo 3 del decreto 1020/21 encomendó al ENRE encabezar el proceso de renegociación con las eléctricas y dispuso al mismo tiempo prorrogar el congelamiento de tarifas, que vencía en diciembre, por otros 90 días o hasta tanto entren en vigencia los nuevos cuadros tarifarios transitorios.
La resolución señala además que en las adecuaciones tarifarias transitorias se deberá atender a garantizar la continuidad de la normal prestación de los servicios, como así también la implementación de los mecanismos de participación ciudadana correspondientes. A raíz de ello, el artículo 2 de la resolución 16/02 establece que el ENRE facilitará la realización de diversas instancias de participación ciudadana, convocando a los usuarios y a las Asociaciones de Defensa del Consumidor, a fin de ser informados de las distintas etapas del procedimiento.
Página/12 consultó al ENRE sobre la fecha para esos encuentros y desde el ente se limitaron a responder, en línea con lo que dice la resolución, que “se estarán comunicando oportunamente con el objetivo de garantizar las correspondientes instancias de participación ciudadana y comunicación fehaciente, tanto a las personas usuarias en general como a las entidades que las nuclean, Tenemos como objetivo primordial de garantizar la publicidad y transparencia del proceso”.
A su vez, a través de la resolución 17/21, también publicada en el Boletín Oficial, el organismo convocó a intervenir en el proceso de renegociación a las empresas distribuidoras de energía eléctrica del AMBA Edenor y Edesur y las transportistas de electricidad Transener, Transnoa, Transnea, Transba, Transpa, Transcomahue y Distrocuyo.
¿Cuánto aumentarán las tarifas?
El ministro de Economía, Martín Guzmán, aseguró el año pasado al presentar el presupuesto 2021 que el objetivo oficial es mantener los subsidios económicos constantes con relación al PBI. Por lo tanto, se supone que durante este año las tarifas deberían acompañar a la inflación. Sin embargo, en el gobierno no hay consenso aún sobre este punto.
Guzmán es el encargado de negociar con el FMI debe mostrarse dispuesto a reducir el déficit, pero dentro de gobierno hay otros sectores que plantean que no es momento de aumentar tarifas, sobre todo en un contexto de pandemia como el actual. El problema es que si no se aumentan las tarifas deberá ser el Estado el que subsidie y, a diferencia de lo ocurrido entre 2003 y 2015, ahora las restricciones fiscales son mayores y la deuda con el FMI opera como una espada de Damocles en el mediano plazo.
Una solución intermedia sería autorizar un aumento de tarifas, pero por debajo de la inflación. Algunas fuentes oficiales señalaron a Página/12 que esa es una de las opciones sobre las que se está trabajando.
El ENRE, por ahora, señaló a través de un comunicado que “las adecuaciones tarifarias transitorias deberán orientarse a garantizar la continuidad y accesibilidad de la
prestación del servicio público en condiciones de seguridad y garantizando el
abastecimiento, por lo que deberán constituir una adecuada solución de coyuntura en
beneficio de los usuarios y las usuarias, así como para las licenciatarias y
concesionarias”.