Federico Delbonis es un héroe del tenis nacional. Aquel partido que ganó en Croacia, en el quinto punto de la final de la Copa Davis 2016, le habrá otorgado un status indeleble a lo largo de los tiempos. Será una condición intrínseca en su carrera, más allá de que haya encarado una suerte de resurrección desde mediados del año pasado.
Hacia fines de la temporada mermó su nivel pero esta semana, en el Argentina Open, tiene su lugar asegurado entre los ocho mejores: este jueves derrotó 6-4 y 6-4 al español Pablo Andújar, en un partido que avizoraba complicado por las emociones del pasado martes, cuando derrotó a su amigo Juan Martín Del Potro en su reaparición en una cancha de tenis tras más de dos años y medio.
"La carga emotiva fue muy diferente. El partido del martes tenía un condimento muy especial. Pero hoy mis nervios se notaron menos por el apoyo de la gente. Me sentí muy local y pude jugar con la gente", analizó el azuleño, quien compartiera con el tandilense aquel maravilloso equipo de la Davis.
Delbonis, entrenado desde 2021 por Mariano Hood -subcapitán en ese cuerpo técnico de Daniel Orsanic-, valoró el cariño del público: "En todo momento la gente, siempre que jugamos acá, nos apoya. Hay un cariño especial con los argentinos. Cada vez que juego en la cancha central me agradecen por el quinto punto de la Copa Davis. Nosotros le tenemos que agradecer a la gente siempre que podamos".
Entre el 5 y el 6 de marzo, ante República Checa en Buenos Aires, Delbonis volverá al equipo copero después de más de cinco años, con la capitanía de Guillermo Coria: "Nunca dije que no volvería a jugar la Davis; jamás le cerré la puerta. Lo que hice fue poner una pausa. Quise priorizar mi carrera. Cuando hablé con Guille y con el Tero (Martín García, subcapitán) me sentí muy bien".
Schwartzman y un trabajado debut
Diego Schwartzman, número 15 del mundo y campeón defensor, inició su camino en el Argentina Open con un trabajado triunfo 7-6 (2) y 7-6 (4) ante el español Jaume Munar (90°), con un muy buen marco de público en la cancha central del Buenos Aires Lawn Tennis Club, en un partido que se extendió por casi dos horas y media. En la próxima ronda se medirá con Francisco Cerúndolo, a quien le ganó la final el año pasado.
Francisco Cerúndolo, a cuartos de final
Por otra parte Francisco Cerúndolo (112°), surgido de la clasificación, derrotó 6-3, 3-6 y 6-2 al serbio Miomir Kecmanovic, entrenado por David Nalbandian, y también avanzó a los cuartos de final.
"Me potenció mucho acá, me gustan las condiciones. Le puedo pegar muy fuerte y la pelota no se me va", analizó el mayor de los hermanos Cerúndolo, finalista de la edición pasada. Al cierre de esta edición debutaba Diego Schwartzman, 15° del mundo y campeón defensor, contra el español Jaume Munar (90°).