En lo que va de 2022, San Lorenzo no ha podido ganar en su estadio. Y ante Tigre, tampoco pudo romper la racha. Es más: empezó perdiendo 1 a 0 con un gol del lateral Lucas Blondel a los 24 minutos del primer tiempo. Y terminó igualando porque a la misma altura de la segunda etapa, el paraguayo Adam Bareiro magnificó con una cabriola en el aire, un pisotón que el zaguero Abel Luciatti le había dado en el área tigrense y, con la ayuda del VAR, transformó en penal lo que había sido una simple acción de juego que el árbitro Héctor Paletta había dejado seguir. El propio Bareiro convirtió con un derechazo fuerte y alto y tan sólo por eso, el empate coronó la tarde.
Aunque antes y después del partido, buena parte de los 35 mil espectadores presentes volvió a cantar contra Matías Lammens y Marcelo Tinelli y a reclamar elecciones cuanto antes, el clima en el Nuevo Gasómetro fue mucho menos tenso que en otros partidos anteriores. La formación eminentemente juvenil del equipo (siete de los once titulares surgieron de las divisiones inferiores del club) y la convicción de que nada perjudica más que hacer responsables a estos jugadores de los desaguisados de quienes conducen, generó en el estadio, un aire más limpio, mucho menos contaminado de gritos e insultos. Aún en el error y con el marcador adverso, los hinchas alentaron a los pibes y disimularon su disconformismo. Pero no se fueron felices de la cancha.
Porque San Lorenzo hizo lo que pudo. Movió mucho la pelota, pero le costó ir más allá de tres cuartos de cancha. A tal extremo que bien vale la pena preguntarse que hubiera pasado si Bareiro no hubiera exagerado un simple contacto de juego. Con el ingreso en el segundo tiempo de Barrios por Braida, el empuje y la voluntad del delantero paraguayo y algunas escapadas de Leguizamón, el equipo de Rubén Insúa se sacudió la inexpresividad inicial y al menos dejó tranquila a la gente por el lado de la entrega, pero no del juego. Tigre sólo complicó con remates desde lejos de Blondel y Menossi y algunos arranques de Colidio. No le alcanzó para ser más y ganar. Pero si para llevarse una igualdad que, al cabo de medio año sin poder anotarse triunfos en su casa (tres derrotas y siete empates) a San Lorenzo no le arregló nada. Le dejó todo en el mismo lugar que antes.
SAN LORENZO 1
Batalla
Luján
Gattoni
James
Giay
Elías
Rosane
F. Mercau
Leguizamón
Bareiro
Braida
DT: R. Insúa
TIGRE 1
Roffo
Blondel
Cabrera
Luciatti
Sosa
E. Fernández
Menossi;
Protti
Zabala
Colidio
Retegui
DT: D. Martínez
Estadio: San Lorenzo.
Arbitro: Ariel Penel.
Goles: 24m Blondel (T); 68m Bareiro de penal (SL).
Cambios: 46m Barrios por Braida (SL), 57m Sequeira por Rosané (SL), 65m Salomón por Colidio (T), 81m Flores por Protti y A. Castro por Zabala (T), 90m Herrera por Leguizamón (SL). Incidencias: 13m el árbitro Penel fue reemplazado por lesión por el cuarto árbitro Héctor Paletta.