Sebastián Báez, el número tres del tenis argentino, vivió un momento muy especial en Nápoles, la tierra en la que recuperó el sendero de la victoria en el marco de un nuevo ATP que se organiza por primera vez esta temporada.
El jugador de 21 años, que en el torneo llegó a octavos de final luego de vencer a Lorenzo Sonego, una de las grandes esperanzas locales, recibió un obsequio lleno de mística: una "réplica" del pie izquierdo de Diego Armando Maradona.
Stefano Ceci, ex manager de Diego, le entregó en persona el presente con el que Báez posó para las fotos, en las que se lo vio con una camiseta homenaje al ex capitán de la Selección Argentina.
La misma remera es la que utilizó apenas logró la victoria en su debut en el torneo napolitano ante Sonego: una "pilcha" tributo a los campeones del Mundial de México 1986, a pocos días del comienzo de una nueva Copa del Mundo.
"El mejor de la historia. Es mi ídolo. Es todo. Es especial estar acá en Nápoles, por estar en la casa de Maradona. Es un momento muy lindo y trato de disfrutarlo", había dicho el actual 37º del mundo a principios de semana.
Para Báez tiene un valor especial estar en la ciudad en la que Maradona edificó gran parte de su leyenda. En la previa del torneo, por caso, recorrió las callecitas de Nápoles junto con su entrenador Sebastián Gutiérrez, y lo hizo también calzado con la camiseta homenaje de la marca que lo viste, la misma que vistió al legendario equipo de Carlos Bilardo durante la gesta de México.
Días atrás, con un mural enorme de Maradona de fondo, Báez posó con Gutiérrez y subió una imagen elocuente a sus redes sociales, con las palabras justas. "Simplemente D10S", escribió.
Luego de su incursión por Nápoles, que representó una inyección anímica con vistas al final de la temporada, el número tres de la Argentina viajará a Suiza para actuar la semana próxima en el ATP 500 de Basilea y, la semana siguiente, estará en París para jugar el Masters 1000 de la Ciudad Luz, la última parada de un gran año que representó su salto a la elite y que lo vio campeón por primera vez en el ATP de Estoril.