La euforia por la Copa del Mundo en Qatar, sobre todo luego del sanador triunfo de la Selección Argentina frente México, por estos días opaca todo tipo de noticia en torno al deporte en general. Este domingo, sin embargo, se activaron los mensajes de Whatsapp en la Asociación Argentina de Tenis luego de una novedad de suma relevancia. El sorteo de los Qualifiers de la Copa Davis 2023, la instancia clasificatoria para las Finales, determinó un rival por lo pronto molesto: Finlandia, de visitante, en condiciones muy adversas.
La eliminatoria representa una amenaza real por diferentes razones, aunque la principal es la ubicación en el calendario: se jugará en febrero del año próximo -3 y 4 ó 4 y 5-, inmediatamente después del Abierto de Australia -finaliza el 29 de enero- y a escasos días del inicio de la gira sudamericana de ladrillo, con el Córdoba Open como primer torneo, la etapa más valiosa de la temporada para casi todos los tenistas argentinos, que suelen sumar ese mes la mayor cosecha de puntos para su ranking ATP.
El capitán Guillermo Coria, que viene de sufrir un duro traspié en la fase de grupos de las Finales en Bologna, en septiembre pasado, tendrá verdadera una prueba de fuego, acaso la más difícil desde que asumiera el cargo. No sólo por la obligación de ganar, una constante para el tenis argentino, sino por el desafío de conformar un equipo competitivo. Los mensajes de su teléfono celular aflorarán en los próximos días porque tiene una tarea primordial de acá a febrero: convencer a los jugadores para actuar en un sinfín de circunstancias desfavorables.
El calendario para los argentinos comenzará en el extenuante calor australiano, sobre cemento al aire libre, continuará en el verano sudamericano, con Córdoba, Buenos Aires, Río de Janeiro y Santiago de Chile, sobre canchas de ladrillo extremandamente lentas. En el medio cayó la serie con Finlandia, cuya temperatura en febrero rara vez excede las cifras bajo cero: la serie será, más que seguro, sobre una cancha dura más rápida que la media y bajo techo.
Los torneos de sudamérica tienen mayor preponderancia para los siete singlistas argentinos del top 100: Diego Schwartzman (25°), Francisco Cerúndolo (30°), Sebastián Báez (43°), Pedro Cachín (54°), Federico Coria (67°), Tomás Etcheverry (80°) y Facundo Bagnis (93°). La única excepción podría ser Horacio Zeballos, 14° en dobles, que tendría cierto margen de maniobra -lleva dos años sin jugar en Córdoba y en 2021 se salteó la gira para ir directo al cemento de Acapulco-. Se vislumbra, entonces, un arduo trabajo para Coria en el diseño del equipo para una serie clave, la misma instancia en la que este año debutó como capitán con una victoria ante República Checa, de local y con las condiciones a favor.
Luego del golpe en Bologna, en una fase de grupos en la que siquiera pudo ganar un partido de singles, Argentina quedo 15° en el ranking de naciones y fue 11° preclasificado entre los 24 equipos del sorteo para los Qualifiers, que tuvo lugar en un momento especial: se hizo en Málaga, justo en el sexto aniversario de la indeleble conquista de la Argentina en Zagreb, con aquella conducción del capitán Daniel Orsanic, y en la previa de la final que consagró por primera vez campeón mundial a Canadá (superó 2-0 a Australia y es el 16° país campeón en los 122 años de historia de la ensaladera).
La elección de la localía resultó un aspecto bisagra en el azar para la Argentina por el doble sorteo, el que determinó a Finlandia como rival y el que arrojó que tendrá que jugar de visitante: el antecedente más reciente entre las dos naciones fue antes de 1970, el año límite para decidir la localía en el bolillero, que al cabo benefició al conjunto nórdico -el único enfrentamiento entre ambos fue en 1960, en Helsinki, con triunfo argentino por 5-0, con Eduardo Soriano y Roberto Aubone en todos los puntos.
Finlandia no sólo tiene los atributos de todo país nórdico en la Copa Davis cada vez que juega de local, con las recordadas "canchas de hielo", sino que además hoy disfruta de un equipo compacto con un potencial que representará un riesgo importante para la Argentina. Viene de aplastar por 5-0 a Nueva Zelanda en Espoo, al sur del país. Sus principales piezas son los singlistas Emil Ruusuvuori (23 años; 40° del mundo) y Otto Virtanen (21; 176°), además del poderío del experimentado doblista Harri Heliovaara (33; 11° en la modalidad).
La mejor actuación de Finlandia en la centenaria Copa Davis, luego de 133 series disputadas desde su debut en 1928, fue haber alcanzado la primera ronda del Grupo Mundial en tres ocasiones: en 1990 cayó 5-0 ante Suecia, en 1999 perdió 3-2 contra Italia y en 2002 se despidió tras el traspié 4-1 frente a Holanda. La historia de Finlandia está muy lejos del recorrido copero de Argentina, que llegó a jugar cinco finales del mundo, pero esta vez representará una incógnita para Coria, con la obligación simultánea de ganar y de presentar el mejor equipo posible.