En la Argentina, la falta de regulación sobre el trabajo en plataformas ha generado un mercado laboral que muestra signos preocupantes de precarización. En la última década, se ha observado un aumento significativo en la creación de puestos de trabajo que se presentan como "flexibles y autónomos", pero que en realidad ocultan condiciones laborales precarias.
Esta tendencia se ha visto exacerbada por la expansión de plataformas digitales que conectan a trabajadores con empleadores de manera virtual. Aunque la flexibilidad y la autonomía son aspectos valorados por muchos trabajadores, no deben utilizarse como excusa para explotar a los empleados. Es imperativo que se establezca una agenda política que aborde esta problemática y busque soluciones regulatorias efectivas.
Las plataformas de trabajo remotas (o de cloudwork) han cobrado impulso en los últimos años como alternativas para los trabajadores, especialmente los marginados en los mercados laborales formales por motivos geográficos, discriminación, discapacidad, responsabilidades asistenciales y otros factores.
Estas plataformas se están adoptando cada vez más en el desarrollo de tecnologías digitales con prácticas de subcontratación en línea. Las plataformas de microtrabajo proporcionan mano de obra de todos los continentes a las principales empresas de Inteligencia Artificial en tareas operativas como el ingreso y procesamiento de datos.
Plataformas
Estos acuerdos laborales también se caracterizan por estar regidos con cláusulas poco claras, generando problemas como salarios bajos y faltas de pago, una competencia feroz derivada de un exceso de oferta de mano de obra, largas jornadas laborales, riesgos y daños derivados de tareas peligrosas, falta de transparencia en los sistemas de gestión y procesos difíciles en términos resolución de conflictos, que a menudo inclinan la balanza del poder hacia los clientes.
¿Cuáles son las condiciones laborales de estas plataformas? El informe Fairwork Cloudwork Ratings 2023 arrojó luz sobre estas empresas. En él se evaluaron y puntuaron las normas básicas de equidad en los acuerdos laborales de 15 plataformas laborales digitales basadas en la web según los cinco principios de Fairwork: remuneración, condiciones, contratos, gestión y representación justos.
La investigación forma parte del proyecto Fairwork, con sede en el Oxford Internet Institute de la Universidad de Oxford (Reino Unido) y en el Centro de Ciencias Sociales WZB de Berlín (Alemania), y está financiada, entre otros, por el Ministerio Federal alemán de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ), por encargo de la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ).
El estudio evaluó aspectos como si los trabajadores reciben una remuneración, si obtienen ingresos equivalentes a su salario mínimo local, si se mitigan los riesgos para la salud y la seguridad, si los contratos están disponibles y son transparentes, si las políticas tienen cláusulas abusivas, si las empresas ofrecen canales de comunicación y procesos de apelación, si se aplican políticas antidiscriminatorias, si los métodos para asignar el trabajo son transparentes y si los trabajadores pueden organizarse colectivamente y comprometerse con las plataformas.
Las plataformas estudiadas en este informe se seleccionaron en función de su alcance global (como Freelancer.com, Upwork, Amazon Mechanical Turk, Fiverr y Scale/Remotasks), su posición como líderes del mercado regional (como Workana, Terawork y SoyFreelancer) y las empresas centradas en segmentos específicos, por ejemplo, la investigación académica (Prolific). El estudio recogió pruebas de la investigación documental, de los gestores de plataformas y de una encuesta en la que se entrevistó a 752 trabajadores de 94 países.
Precarización
Las puntuaciones de este año muestran que las plataformas aún están lejos de salvaguardar las normas básicas del trabajo justo, expresadas en cinco principios. Tres plataformas obtuvieron 5 puntos sobre 10 (ComeUp, Prolific y Terawork). En el caso de las otras 12 plataformas, no se han podido obtener pruebas de que cumplieran más de 3 de nuestros 10 umbrales. Para cuatro plataformas, no se encontraron pruebas de que cumplieran ningún umbral.
Por otro lado, para casi todas las plataformas estudiadas en este informe, no se encontraron pruebas de políticas que garantizaran que todos los trabajadores ganaran al menos su salario mínimo local, que los contratos fueran justos y transparentes y no exigieran a los trabajadores renunciar a sus derechos a un recurso legal razonable, y que las plataformas se comprometieran a un proceso de resolución de conflictos a través del cual los trabajadores tuvieran acceso a un defensor independiente elegido libremente por el trabajador o por un organismo independiente de trabajadores.
Aunque queda mucho camino por recorrer para llegar a un escenario en el que las plataformas cumplan plenamente las normas mínimas de trabajo justo, tras comprometerse con el equipo de Fairwork Cloudwork, algunas plataformas han ido adoptando cambios para mejorar las condiciones laborales.
Algunas plataformas han tomado medidas para garantizar un salario mínimo a los trabajadores, han actualizado los contratos para hacerlos más justos para los trabajadores, han implementado y mejorado los canales y procedimientos de apelación y han introducido nuevas políticas contra la discriminación.
Estatuto
Una posible alternativa para abordar esta situación sería la creación de un estatuto único que tenga en cuenta las particularidades del trabajo en plataformas. Este estatuto podría capitalizar las ventajas del trabajo digital, como los horarios flexibles y la autonomía, garantizando al mismo tiempo que los trabajadores reciban un salario justo y que se respeten sus derechos laborales básicos, como las horas de trabajo y las condiciones de seguridad.
Además, debería establecer mecanismos de supervisión y regulación que eviten el abuso por parte de las plataformas, como imponer límites a las horas de trabajo o establecer estándares mínimos de remuneración. En última instancia, se necesita un enfoque equilibrado que permita a los trabajadores disfrutar de los beneficios del trabajo en plataformas sin caer en la trampa de la precarización laboral.
La visión de conjunto que ofrece el estudio pone de manifiesto la necesidad de respuestas por parte de las partes interesadas, desde las plataformas hasta los responsables políticos. Una oportunidad para mejorar las condiciones de los trabajadores de cloudwork es la posibilidad de que la Organización Internacional del Trabajo apruebe un convenio internacional.
La conferencia de la OIT de 2025 debatirá este tema. El convenio internacional puede ser una poderosa norma básica para establecer límites a los abusos y las prácticas desleales en las plataformas laborales digitales. Además, presentará referencias para la aprobación y aplicación de leyes nacionales dedicadas a la economía de plataforma.
* Economista, investigadora principal de Fairwork Argentina e investigadora en Centro de Investigaciones en Administración Pública (FCE-UBA) y Centro Cultural de la Cooperación.
** Investigador postdoctoral, Oxford Internet Institute, Universidad de Oxford.