“Dolor de cabeza en el Central” parece un título apropiado para lo que pasa en estos días, pero tiene seis años de antigüedad. El viernes 5 de noviembre de 2004 este diario publicó, bajo la firma de Marcelo Zlotogwiazda, un artículo en el que se afirmaba que la Fiscalía Nacional de Investigaciones Administrativas había solicitado que Martín Redrado fuera citado a declaración indagatoria en una causa por malversación de caudales públicos.

Lo mismo se había solicitado para Carlos Menem y Eduardo Bauzá. A Redrado se lo acusaba de malversación de caudales públicos, peculado y desvío de fondos reservados durante su gestión al frente de la Comisión Nacional de Valores durante la presidencia de Carlos Menem. En esa nota se afirma que el fiscal Manuel Garrido señaló en un escrito presentado en la causa judicial que “a criterio de esta Fiscalía estos testimonios, sumados al contexto que lo rodea, son una prueba contundente que demuestra que efectivamente Hernán Martín Pérez Redrado recibía grandes sumas mensuales de dinero (y que) la magnitud de los fondos que se movilizaban en este curso clandestino de la actividad estatal era muy importante, especialmente por el tiempo durante el cual se desarrolló la actividad y la dimensión de las cifras que se manejaron”.

Hay varios ex funcionarios de aquella época procesados por sobresueldos y manejo discrecional de fondos reservados. Más aún, a María Julia Alsogaray el Estado le remató hace pocas semanas su petit hotel para recuperar en parte lo que perdió a manos de la corrupción menemista. Redrado sigue ahí. ¿Había que esperar a esto?

Ariel Sar

DNI 14.829.717