Hace ya un par de meses los vecinos del barrio de Balvanera hemos sido castigados por nuestro intendente Mauricio Macri con lo que cuesta definir como “bicisenda”.

Esta novedad no es más que un carril del ancho de un auto con un tope de cemento que restringe la circulación general para las bicicletas. El problema se suscita cuando en calles como Rincón, por ejemplo, la calle de mi casa hace años, tiene además un carril restringido con parquímetros para estacionamiento (detalle que la gente de Macri parece haber olvidado).

La calle, que antes no tenía problemas de tránsito, ahora ha quedado ahorcada con una sola vía de circulación, siendo un dolor de cabeza cada vez que un taxi se detiene a subir o bajar a un pasajero o simplemente pasa el camión recolector de basura y tapa completamente la circulación de la calle.

Para mejorar el panorama, lo que la gente de planificación vial de nuestro jefe de Gobierno también se olvidó de prever es que ha dejado inhabilitada la calle de alivio de tránsito que usualmente se necesita cuando el Congreso de la Nación tiene, por diversas razones, cortadas sus calles circundantes.

Karen Breier

D.N.I. Nº 25.142.552