Un informe de las Naciones Unidas (ONU) aseguró que el mundo podría terminar con el sida como amenaza global para la salud en 2030, pero para ello debe redoblar esfuerzos, de lo contrario se arriesga que el virus vuelva a salirse de control. El reporte hace un llamamiento para que se establezcan una serie de objetivos de “vía rápida” para combatir la enfermedad, con el fin de prevenir unas 21 millones de muertes. La estrategia propuesta emplea una fórmula 95-95-95 como objetivo para 2020: 95 por ciento de personas sabiendo su estado como VIH positivo, 95 por ciento conociendo su estado VIH positivo y recibiendo tratamiento y un 95 por ciento de aquellos en tratamiento con cargas virales suprimidas.