Sr. Pérez Esquivel: Estoy totalmente de acuerdo con sus palabras. Soy judío, vivo en Jerusalén y sin duda los gobiernos acá están ciegos. También me avergüenzo de las violaciones a los derechos humanos de Israel. Pero hay un dato más que querría agregar: Israel no está apoyada solamente por Estados Unidos y Europa, tratando de destruir a los grupos terroristas apoyados por Irán. Israel está apoyada también por Egipto, Jordania, Arabia Saudita, los países del Golfo Pérsico e incluso la Autoridad Palestina, que quiere deshacerse de Hamas. Lamentablemente, Israel está haciendo el “trabajo sucio” para todos estos países, occidentales y árabes, que quieren debilitar a los extremistas islámicos y a Irán. Los países árabes tienen mucho miedo de que Irán desestabilice sus frentes internos. Lógicamente, los civiles siempre pagan el precio más caro. En resumen, algún día la cordura llegará a Oriente Medio. La pregunta es cuánta sangre se derramará hasta que llegue. Tal vez se derrame tanta sangre como se derramó en Europa, hasta que los pueblos entendieron que la violencia, el racismo, el chauvinismo no llevan a ninguna parte.

Roly Zylbersztein

Universidad Hebrea de Jerusalén