Los entrenadores de Central y Newell’s, Leonardo Madelón y Ricardo Caruso Lombardi, desdramatizaron la suerte del clásico de mañana, el primero que juegan estando ambos equipos en situación de riesgo de descenso. “Que sea un clásico sano, un partido más”, pidió Madelón. “Hay que enseñarles a los jugadores y a la gente a disfrutar estos partidos. No cargarlos de presión y tensión, porque uno los espera desde hace mucho tiempo. Lo más importante es que sea una fiesta.” Caruso Lombardi aseguró estar haciendo “todo lo posible” para que sus jugadores “no entren en la locura de la gente, que tiene desesperación con el clásico”.