Y un día volvió el fútbol. En un partido correspondiente a la primera jornada del Torneo de Invierno 2008, San Lorenzo le ganó a River por penales, con una joyita de Walter Acevedo que sentenció el 6-5 desde los doce pasos con mucha tranquilidad: se la picó a Marcelo Ojeda. Antes Nereo Champagne le había atajado un remate a Andrés Ríos. De esta manera, sin hacer mucho en los noventa minutos, el conjunto conducido por Miguel Angel Russo se clasificó a la final del cuadrangular y ahora espera por el ganador del choque entre Independiente y Gimnasia, que jugarán hoy desde las 15 en el estadio Ciudad de La Plata.

El primer tiempo del duelo fue frío, como el clima que se vivió ayer en Mar del Plata. Aunque mucho prometía el choque en la previa, más teniendo en cuenta el cruce caliente que tuvieron ambos equipos en los cuartos de final de la Copa Libertadores, nada de eso se repitió. Si bien en los primeros minutos pareció que el partido tomaba una dinámica interesante, con subidas de Adrián González y arremetidas de Ariel Ortega, con el correr del tiempo el juego de los dos conjuntos se fue achatando y por momentos se hizo aburrido. Poco y nada intentaron en cada uno de los arcos. Sólo dos remates desde afuera de González, que casi ni inquietaron al arquero de River, que pudo controlar la pelota con facilidad. Así se diluyó la primera mitad con más insinuaciones que chances claras de romper el cero, cuando ninguno de los dos era mucho más que su rival.

Las cosas mejoraron en el complemento. Los dos equipos parecieron soltarse y el partido fue más entretenido. River manejó los primeros minutos. Con la entrada de Rosales en el mediocampo, el conjunto de Diego Simeone fue más dinámico, tuvo más control del balón y hasta inclinó la cancha hacia el arco de Nereo Champagne. Pero como el fútbol muchas veces no es lógico, en la primera llegada de San Lorenzo llegó el gol. Luego de un tiro libre desde la izquierda, Bernardo Romeo remató de cabeza, solo, por el segundo palo y no le dejó chances al arquero Ojeda que nada pudo hacer. 1-0 para los de Miguel Angel Russo que hasta el momento no habían hecho mucho más que defenderse.

A partir de ahí el encuentro volvió a hundirse en el vacío futbolístico. Hasta que otra vez desde una pelota detenida llegó el gol, pero esta vez para River. Luego de un grosero error de Méndez, que se la bajó a Ortega, el jujeño puso el empate a cinco del final. Una vez culminado el encuentro la paridad se quebró desde los doce pasos y el toque lo aportó Acevedo al picarle el balón a Ojeda. Lujo y victoria para San Lorenzo.