Después de muchas idas y vueltas, Lionel Messi llegó a China para sumarse al seleccionado olímpico que participará de los Juegos de Beijing. Acompañado por Pep Costa, un miembro del cuerpo técnico de Barcelona, y sin hacer declaraciones, el delantero argentino arribó ayer al aeropuerto de Shangai Pudong, donde lo esperaron un centenar de fanáticos locales en busca de autógrafos y fotos. De esta manera, ya se completó el plantel Sub-23, que continuará con los entrenamientos a la espera del debut en la competencia, el próximo jueves, ante Costa de Marfil. Antes de ese partido, ya estará definido el fallo del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), que se comprometió a dar sentencia respecto del recurso presentado por el Barcelona en los primeros días de la próxima semana.

El joven, de 21 años, llegó a tierras asiáticas desde Barcelona, luego de jugar un amistoso en Italia para su club el miércoles pasado, y arribó custodiado por un fuerte operativo policial. Desde el aeropuerto, Messi se dirigió al hotel Huating, donde está concentrada la Selección, y ya en el entrenamiento de la mañana (en la noche argentina) comenzó a entrenarse con el equipo de Batista, que hasta el momento estuvo trabajando en los estadios de Songjiang, en las afueras de Shan-ghai, y de Yuanshen, que tiene capacidad para 20 mil personas.

El futbolista del Barcelona no hizo declaraciones en el hotel, que está convertido en un fortín, rodeado de vallas de seguridad y fuertemente vigilado desde hace varios días por agentes de la policía armada china, que mantienen un total hermetismo, a tal punto que la prensa tiene vedado el acceso al edificio, incluidos los periodistas con acreditación olímpica.

En tanto, el TAS decidirá la semana próxima el recurso presentado por el club catalán, ante la decisión de la FIFA de ordenar la liberación de jugadores menores de 23 años para la competencia olímpica en Beijing. El secretario general del tribunal, Matthieu Reeb, señaló que la resolución llegará “el seis de agosto a más tardar”, aunque intentarán que el fallo esté para lunes o martes de la semana próxima. “Trataremos pronto el tema de Messi junto a los casos del Werder Bremen y el Schalke 04. Habrá que ver si existe la obligación de los clubes de ceder a sus jugadores a los Juegos Olímpicos, y en el caso de que así sea las federaciones deberán cumplir, porque no se trata de una opción, sino una obligación”, sostuvo Reeb.

Mientras tanto, Messi seguirá de cerca la decisión ya que antes de partir hacia China aseguró que si tiene que volver, lo hará. Aunque por los recientes fallos no se espera que peligre la participación del argentino en los Juegos, en el caso de que le den el visto bueno al Barcelona, el delantero volverá con Pep Costa, que permanecerá en Beijing hasta que se dé la resolución.