Con un gran gol de Martín Morel, Tigre pudo saltar a la punta del torneo. En un partido que de entrada se le presentó bastante complicado, el conjunto de Diego Cagna pudo vencer con autoridad 1-0 a Gimnasia de Jujuy, que todavía no puede salir del fondo de la tabla y sumó su tercer partido sin ganar. Con un presente totalmente opuesto, el local se colocó en lo más alto del campeonato y mirará a todos desde la cima, al menos hasta esta tarde, cuando San Lorenzo enfrente a Arsenal.

De arranque, Tigre se mostró impreciso, incómodo en la cancha y sin claridad. Mucho le costaba al conjunto de Diego Cagna manejar la pelota con autoridad en el mediocampo y, para colmo, los jujeños habían salido bien parados y muy decididos. Presionaban, luchaban y podían conducir los tiempos del encuentro con facilidad. Así, parecía que el objetivo de los locales de alcanzar lo más alto de la tabla se les iba a complicar.

Pero en la primera jugada de riesgo, tras un grosero error de Loeschbor, la historia empezó a cambiar. Luna aprovechó la falla del defensor, saltó a cabecear y le dejó al pelota servida a Morel, que con un certero remate cruzado puso el 1-0 para Tigre, que a partir de ese momento comenzó a desplegar su superioridad.

Sin ser mucho más que Gimnasia, el equipo local se fue parando mejor en el campo y con varios chispazos por la banda izquierda pudo crear algunas situaciones de riesgo, pero siempre falló en la puntada final. Primero Altobelli tuvo una posibilidad con un cabezazo que mandó por arriba del travesaño y luego, otra vez el delantero, también por arriba, pudo aumentar el marcador, pero Islas tuvo una muy buena respuesta y sacó la pelota del ángulo. Con poco el equipo de Cagna era mucho más.

El conjunto de Omar Labruna tenía la pelota y la hacía circular, sobre todo cuando estaba en los pies de Fileppi, pero no tenía peso en ataque. Carranza pasaba inadvertido y la dupla Gómez-Pieters no pesaba en el juego, por lo que siempre terminaban cayendo en el remate de larga distancia que no inquietó al arquero rival.

En el complemento, el desarrollo se repitió. Tigre salió más decidido y así inclinó la cancha a su favor. De esa manera, no tardó mucho en crear situaciones de riesgo en el arco de Pezzutti, que varias veces impidió que la diferencia sea mayor. Sin embargo, hasta el final del partido el resultado no se alteró. Gimnasia se vio totalmente desbordado y para parar la ráfaga que eran los jugadores del local utilizó mucho el juego brusco, y así se quedó con dos jugadores menos.

Eso permitió que Tigre consiguiera mayores espacios y manejara la pelota con comodidad. En ese lapso se vio un conjunto dinámico, preciso y que fue ampliamente superior a los jujeños, que no pudieron reaccionar. Así terminó en festejo de los de Victoria que, al menos hasta que se complete la fecha, mirarán a todos desde arriba.

1- TIGRE

Islas; Jerez, Paparatto, Blengio, Arruabarrena; Rosano, Blanco, Morel, Giménez; C. Luna, Altobelli.

DT: D. Cagna.

0- GIMNASIA (J)

Pezzutti; Acuña, Loeschbor, Desvaux; Pieters, Mateo, Ramasco, Gómez; Fileppi; Carranza, Arraya.

DT: O. Labruna.

Estadio: Tigre.

Arbitro: Juan Pablo Pompei.

Gol: 6m Morel (T).

Cambios: 55m Calandria por Carranza y J. Luna por Mateo (GJ); 65m San Román por Rosano (T); 70m Ayala por Morel (T) 73m Iuvalé por Fileppi (GJ); 83m Villegas por Altobelli (T).

Incidencias: 60m expulsado Pieters (GJ); 86m expulsado Ramasco (GJ).