El volante de River Oscar Ahumada, elegido por sus propios compañeros para ser el capitán del equipo, expresó ayer que sabía que tenía esa chance por la cantidad de años que lleva jugando en la entidad de Núñez. Ahumada fue duramente criticado el año pasado por los simpatizantes del club, luego de la eliminación de River en la Copa Libertadores, por la frase famosa hacia ellos: “En el Monumental hubo un silencio atroz”. Luego de las polémicas declaraciones, que incluso enfurecieron más a los seguidores cuando destacó nada menos que el fervor que transmite la hinchada de Boca, le costó ser aceptado por el público, algo que quiere conseguir definitivamente con la llegada de Néstor Gorosito como técnico.

El nuevo conductor tomó la decisión de que fueran los propios integrantes del equipo quienes eligieran al nuevo capitán, y los jugadores se inclinaron por Ahumada antes del encuentro frente a Independiente, por el pentagonal de verano, y la subcapitanía recayó en el defensor Paulo Ferrari. “Quedan pocos líderes en el fútbol como Eduardo Tuzzio, Ariel Ortega y Sebastián Abreu”, dijo Ahumada, quien igual se mostró confiado en poder llevar con altura el brazalete. “Llevo muchos años en el club y sé lo que necesita el equipo. Espero darle al grupo lo mejor de mí y recibir lo mismo del resto de mis compañeros”, remarcó.

“Este es un grupo joven, en el que todos vamos a tratar de tirar para adelante, cada uno de nosotros irá creciendo a medida que pasen los partidos”, completó. Ante una consulta sobre el tema refuerzos, el nuevo capitán señaló que no es un tema que lo tenga sin dormir, ni mucho menos. “No me preocupa que aún no se hayan incorporado refuerzos y en este club tenemos que tirar hacia delante con lo que tenemos, porque es la misma base con que salió campeón el año pasado”, enfatizó.

“En este plantel hay muy buenos jugadores y a algunos quizá les falta soltarse un poco más, pero están Augusto Fernández, (Diego) Buonanotte y (Matías) Abelairas, que tienen un buen pie. Eso es bueno”, agregó.