Además de los diez participantes que, habitualmente, tienen las Eliminatorias sudamericanas, algunos creen que algún rival adicional se suma y se agranda en determinadas ocasiones: la altura. Desde que la pelota no doblaba (Passarella dixit), la cuestión ya era vieja, basta con recordar aquella Selección fantasma que Enrique Omar Sívori armó en 1973 para jugar en La Paz. Esta Selección que conduce Diego Armando Maradona intenta restarle dramatismo a esa situación, aunque sólo llegará a los 3600 metros de altura de La Paz unas dos horas antes del partido de esta tarde, el duodécimo compromiso de la Selección en el camino al Mundial de Sudáfrica del año próximo. Y hasta ahí nomás, porque crece la sensación de que Maradona privilegiará a Carlos Tevez en el ataque, en lugar de Sergio Agüero, físicamente más menudo, y que incluso en el medio se inclinará por Luis González, de dinámica más ralentizada que la de Angel Di María, quien se perfilaba en primer término para reemplazar al suspendido Jonás Gutiérrez.

“Jugamos contra Bolivia, no contra la altura”, enfatizó Maradona antes de viajar. En la concentración boliviana se acepta que “la altura no garantiza resultados”, como señaló Ronald Raldes, el ex zaguero de Central y capitán del seleccionado verde en diez de los once partidos ya disputados por estas Eliminatorias, que sorpresivamente fue borrado por el entrenador Erwin Sánchez del partido de hoy, pero apuestan a esa ayuda como medio de emparejar chances que, en condiciones normales, son bastante dispares. “Tenemos que tener un fútbol dinámico y jugar rápido las pelotas paradas para poder sacar provecho de la altura. El secreto es manejar la pelota, mover al rival, atacarlo pero sin pelotazos, manejando la pelota”, manifestó Raldes como vocero de sus compañeros.

Que Bolivia defienda su posición en la altura es una política de Estado. El presidente Evo Morales fue el protagonista principal de una fuerte campaña, apenas un año atrás, en contra de la decisión de la FIFA, luego revocada, de impedir los partidos a más de 2500 metros de altura. Esa campaña mereció, en su momento, el firme apoyo de Maradona, todavía no entronizado como técnico de la Selección, quien el 17 de marzo de 2008 marcó tres goles en un encuentro disputado en el Hernando Siles, el mismo estadio en el que hoy jugarán ambos seleccionados. “Los argentinos no le tenemos miedo a la altura –señaló Diego un año atrás–. Ustedes, los bolivianos, tienen que jugar donde nacieron.” En La Paz se anunció que hoy le entregarán una plaqueta al ahora entrenador de la Selección en agradecimiento a su apoyo.

“En Bolivia hay que sacar otros tres puntos. La gente se ilusiona con la calidad de jugadores que hay en la Selección y creo que podemos aspirar a lo que sea”, manifestó Sergio Agüero antes de viajar. Todo indicaba anoche que sería suplente y en su lugar jugaría Tevez. Maradona recién confirmará hoy el equipo. “Seguro que el triunfo contra Venezuela nos da mucho más ánimo para el partido contra Bolivia. Nosotros queremos ir y ganar”, expresó Fernando Gago, uno de los inamovibles. “Estamos preparados para jugar en La Paz –recordó Javier Zanetti–. Vamos a ir a buscar los tres puntos.”

Antes de viajar a Santa Cruz de la Sierra, ayer por la tarde, el seleccionado cumplió un último entrenamiento en Ezeiza, en el que Maradona paró el equipo para enfrentar a Bolivia, con Luis González entre los titulares. La idea es un equipo compacto, que pueda manejar la pelota en el mediocampo y que resista los ataques del conjunto boliviano, sobre todo en los primeros minutos del partido. El plantel permanecerá en esa ciudad hasta el mediodía, cuando volará rumbo a la capital boliviana.

BOLIVIA: Arias; Gatty Ribeiro, Peña, Rivero, A. Reyes; Da Rosa, Robles, Flores, Gómez; Martins, Botero.

DT: Erwin Sánchez.

ARGENTINA: Carrizo; Zanetti, Demichelis, Heinze, Papa; Rodríguez, Mascherano, Gago, L. González; Messi, Tevez.

DT: Diego Maradona.

Estadio: Hernando Siles (La Paz).

Arbitro: Martín Vázquez (Uruguay).

Hora: 16.30.

TV: Canal 13 y TyC Sports.