El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, provocó de nuevo un sorpresivo cambio de reglas con el que quiere preparar el camino para la implantación de los deseados “jueces de gol”. Ya en la primera temporada de la nueva Europa League, que sustituye a la Copa UEFA, habrá en el campo otros dos árbitros, elevando a cinco el total de jueces. Con ello, goles tan controvertidos como el famoso gol de Geoffrey Hurst en la final del Mundial 1966 en Wembley pertenecerán definitivamente al pasado. Los árbitros adicionales se apostarán detrás de los arcos, centrarán su atención en lo que ocurra en el área penal y podrán comunicarse con el árbitro principal. El presidente de la UEFA, Michel Platini, es considerado como el principal propulsor de los jueces de gol. Hasta ahora, el bloque de cinco árbitros se probó sólo en el fútbol juvenil. El consejo de la FIFA es quien debe decidir finalmente sobre la implantación de los asistentes adicionales. Se archivó por el momento la implantación del chip en la pelota, que en varias fases de prueba demostró no ser adecuado aún.