Juan Martín Del Potro debuta en el Masters de París-Bercy contra un jugador que, paradójicamente, podría retirarse tras el partido. Es que el ruso Marat Safin, 29 años, ex número 1 del mundo y actualmente en el puesto 65, verdugo de la Argentina en la final de la Copa Davis del 2006, ha decidido ponerle punto final a su carrera en este certamen, el último de importancia de la temporada regular, lo que sucederá definitivamente hoy si el argentino –que nunca lo enfrentó– lo vence.

Safin estuvo a punto de perder en su presentación en París-Bercy (torneo que ganó en tres oportunidades, en 2000, 2002 y 2004) ante el local Thierry Ascione. “Espero mantener el nivel contra Del Potro, estar a la altura para poder seguir en el tenis, porque me gustaría dejar mi carrera con dignidad”, señaló el lunes tras el debut.

A punto de colgar la raqueta, Safin criticó al ex rival André Aga-ssi, al que calificó de “estúpido” por haberse drogado en el circuito y le pidió que “devuelva los trofeos”, en relación con las confesiones que el tenista estadounidense formuló en su reciente autobiografía.

“¿Se siente culpable? Pues que sencillamente devuelva los títulos, el dinero, los Grand Slams”, dijo irónico el ruso al diario L’Equipe. “Si está tan a favor del juego limpio, debería ir hasta el final.”

“La ATP tiene una cuenta bancaria, puede reembolsarla si quiere”, insistió el ruso, que criticó el hecho de que Agassi haya elegido escribir un libro para explicar que tomó metaanfetaminas en 1997 y que luego mintió en una carta a la ATP para escapar del castigo.

“La ATP mantuvo su secreto, así que ¿por qué es tan cruel con ellos? Hay momentos en los que necesitas saber callarte”, señaló el controvertido Safin, reconocido por su temperamento explosivo: en el 2005 le llevaban contadas 300 raquetas rotas contra el piso en esos ataques de furia. El mismo que en el 2004, para festejar un tanto imposible... ¡se bajó los pantalones! “Yo no escribiré mi biografía, no necesito dinero. La cuestión es: ¿por qué Agassi lo hizo?”, se preguntó. “Lo hecho, hecho está. Espera vender más libros. Pero es completamente estúpido.”