Las chances del cordobés José María López de integrarse a la Fórmula Uno con el equipo USF1 se complicaron seriamente tras admitir Peter Windsor, propietario de la escudería, que no están listos para comenzar la temporada. El anuncio lo realizó el propio Windsor a José María López (padre) y Felipe McGough, en Charlotte, a quienes les confirmó que el equipo no está listo para comenzar la temporada de la máxima categoría y se perdería por los menos las tres primeras carreras del año. Por eso, el futuro de Pechito ahora es incierto, aunque los allegados al piloto mantienen cautela, ya que el equipo Campos y el Stefan GP podrían aparecer ahora como una opción para el argentino.

Windsor, director deportivo de la escudería estadounidense, reunido en la sede con López padre, le manifestó que no llegará a construir los autos del USF1 en los plazos convenidos y que no sabe qué hará con su proyecto. Horas antes habían surgido otras complicaciones, cuando el principal inversor del USF1, Chad Hurley (cofundador del sitio YouTube), habría abandonado el emprendimiento y negocia sus dólares con otro equipo: el Campos Meta español que tiene listo dos Dallara, pero no cuenta con el dinero para retirar los autos.

En el medio están Pechito López y el proyecto encarado con el Automóvil Club Argentino y un importante grupo de empresas, sumado al apoyo recibido del gobierno nacional para reunir el presupuesto. Argentina acordó desembolsar, a través del Automóvil Club Argentino, dos millones de dólares, de los cuales 830 mil ya fueron depositados en una cuenta bancaria de Estados Unidos.

Ante este panorama, el equipo Campos y el Stefan GP surgieron como una alternativa para el piloto argentino. En el caso del team español, el brasileño Bruno Senna ya tiene asegurada una butaca, mientras que la escudería que maneja el poderoso Stefanovic contaría con el japonés Kazuki Nakajima, a partir del dinero que habría puesto para el proyecto. McGough y López padre viajaron desde Charlotte hacia Europa y ahora la intención es reunirse en forma urgente con el inglés Bernie Ecclestone para negociar la entrada del piloto en una de las dos escuderías.

Así las cosas, para el piloto es un golpe a la ilusión porque la carrera contra reloj del equipo USF1 para estar en la grilla del Gran Premio de Barhein, cuya actividad oficial comenzará en veintidós días, parece estar perdida. Por eso, la única opción posible sería sumarse a alguna de las dos escuderías con butacas disponibles, ante el sombrío panorama del proyecto encabezado por el periodista inglés Peter Windsor.