Con la Copa Libertadores por delante y con la urgencia de sumar puntos para engrosar el promedio, Independiente retomó ayer los entrenamientos en Villa Domínico, sin la presencia de Antonio Mohamed, quien aguarda a los jugadores en Mar del Plata. Lejos de preocuparse por los sobresaltos que pueda producir la tabla de la permanencia, el máximo referente, Carlos Matheu, aseguró que el plantel ya se fijó objetivos altos: “La idea es ver si podemos ganar algo más. Iremos por la Copa y el Clausura. Los dos torneos son importantes y no se puede descuidar ninguno de los dos frentes”.

La dirigencia aún planea incorporar un centro delantero. Ignacio Risso y Rodrigo Mora surgieron como alternativas, mientras que el propio Matheu aclaró que la llegada de Germán Denis es improbable: “Allá lo compraron hace poco y parece que están muy contentos con él. Pero sus ganas de volver siempre están, porque siempre está al tanto de los resultados y sigue a Independiente”.

Por otra parte, el colombiano Iván Vélez (foto), proveniente de Once Caldas a préstamo por un año, se entrenó por primera vez junto a sus nuevos compañeros. En cambio, Matías Defederico estuvo ausente, ya que firmó su incorporación por la tarde y recién se sumará el miércoles. “La obtención de la Copa Sudamericana levantó la confianza del plantel. Estas vacaciones fueron diferentes, más lindas”, resaltó Matheu, aunque sin descuidar lo que vendrá: “Tenemos mucha competencia por delante. Hay que estar a la altura de las circunstancias y ganar”.