All Boys, que sigue en zona de Promoción e hizo los méritos para quedarse con los tres puntos, empató ayer con Lanús 0-0, como local. El equipo de Floresta cortó una racha de cuatro derrotas seguidas, pero llegó a los 573 minutos sin goles a favor.

All Boys, con el ingreso deAriel Zárate como enganche, tuvo más tiempo la pelota en su poder, fue más peligroso que su rival, contó con las mejores ocasiones y mereció irse al descanso en ventaja.

A los seis minutos el defensor Eduardo Domínguez estrelló un cabezazo contra el palo y luego Caranta salvó en dos oportunidades ante el delantero Emanuel Gigliotti, en las ocasiones más claras de All Boys en la primera parte.

Por el lado de Lanús, no hubo juego asociado ni cambio de ritmo en las réplicas, lo que provocó el visible enojo de su entrenador, Gabriel Schurrer. Además, el árbitro Juan Pablo Pompei perjudicó al local en dos jugadas muy claras: Mauro Camoranesi, ya amonestado, golpeó con su codo a Hugo Barrientos en la cara y no fue echado, mientras que Paolo Goltz cometió una violenta falta sobre el uruguayo Juan Pablo Rodríguez para expulsión directa, aunque sólo recibió amarilla.

El segundo tiempo fue más parejo, pero los locales continuaron con la permanente búsqueda, a veces con poca claridad, para desnivelar ante un deslucido Lanús, que dejó una pobre imagen en Floresta.