La rápida eliminación en los play-offs de la NBA dejó a San Antonio con las manos vacías tras la caída frente a Memphis y a Emanuel Ginóbili con una temprana vuelta a casa. El bahiense retornó al país y ya se enfoca en lo que será su próximo objetivo: el Preolímpico que se desarrollará en Mar del Plata y que otorgará dos plazas para Londres 2012. “Genera mucho entusiasmo volver a jugar con la camiseta argentina”, aseguró.

“Estoy feliz de volver al país y poder jugar el Preolímpico. Participar y ganar un Juego Olímpico es lindo, pero poder hacerlo con tu gente en un torneo que clasifica a la máxima competencia del deporte mundial es sumamente gratificante”, enfatizó el bahiense. Y agregó: “Así como la gente ya está viviendo la previa del certamen con gran intensidad, y se interioriza por cada uno de los jugadores, en mi caso la expectativa es muchísima. Siempre hablamos de este torneo con Luis (Scola), el Chapu (Andrés Nocioni) y Fabricio (Oberto). Se siente como la culminación de toda una trayectoria que merece cerrar de la mejor manera”.

De esta forma, Ginóbili puso en consideración lo que podría ser el broche de oro para la carrera de la generación que le brindó a la Selección la posibilidad de posicionarse entre los mejores equipos del planeta. “Ya no somos el equipo largo y con un gran recambio como sucedió en otros torneos. El caso de Atenas en 2004 es ejemplar en ese sentido. Ahora, la realidad marca que la energía del plantel es distinta y, si bien adquirió una experiencia notable, no somos pibes”, justificó.

En consonancia con esa situación, los problemas físicos fueron determinantes en el escolta de 33 años y su ausencia en el primer juego de la serie que decretó la eliminación de San Antonio fue clave. “Me dolió no haber podido ayudar al equipo en el juego inicial, que terminó siendo fundamental para la derrota. Ahora, la pequeña fractura en el húmero está soldada en un 85 por ciento. Tendré que estar sin hacer nada durante tres semanas y luego empezaré con la recuperación. Quiero llegar al comienzo de los entrenamientos el 29 de julio con un buen estado físico”, indicó.

Además, Manu habló sobre la realidad que vive Oberto, quien se había retirado por una afección cardíaca pero que regresará para jugar el Preolímpico. “Sé que Fabricio no nos podrá dar los 35 minutos de 2002, pero con que juegue entre 15 y 20 y aporte lo que él sabe hacer, nos vendrá bárbaro”, señaló Ginóbili, que se mostró preocupado por la operación en la rodilla que se realizó Luis Scola: “Tras una artroscopia uno no sabe cómo va a quedar”.

Informe: Matías Quercia.