Los jugadores de River, encabezados por Ferrero, se retiran sorprendidos del estadio de San Lorenzo.
Imagen: Martin Mancini.

Aldosivi derrotó 2-1 a River como visitante, en cancha de San Lorenzo, e hizo historia. Le quitó la punta a los dirigidos por Matías Almeyda, terminó con el invicto de 11 fechas que ostentaba el elenco de Núñez, y a su vez, se convirtió en el primer equipo en vencerlo en la Primera B Nacional.

“Hay que jugarle como lo hizo Deportivo Merlo.” Esa fue la receta que había dado Fernando Quiroz, que debutaba como entrenador de Aldosivi. El conjunto de Mar del Plata planteó un partido inteligente, tal cual lo había hecho Deportivo Merlo en cancha de Independiente. La idea era agrupar gente en el mediocampo, asfixiar y promover el error del rival, y salir rápido de contra por los costados a través de Malcorra y Vega.

La estrategia no falló, o por lo menos, pareció tener efectos en el juego millonario. En el primer tiempo, fue todo cuesta arriba para los dirigidos por Matías Almeyda. Es que además de estar muy imprecisos con la pelota, hubo graves desacoples defensivos, que casi le salieron caro. Apenas comenzado el encuentro, a los tres minutos, Matías Gigli, tras un grosero error de Arano en la salida, quedó mano a mano ante Chichizola, pero no definió bien y remató desviado.

Si a River le costaba llegar y armar juego, todo empeoró cuando a los 21, tras un tiro de esquina desde la izquierda, Iván Furios, ex Boca, cabeceó cruzado de pique al suelo y ubicó la pelota por encima de Chichizola, para abrir así el marcador.

En desventaja todo fue aún más difícil para River, que estuvo cerca de quedar dos goles abajo cuando a los 44, tras un error infantil entre Chichizola y Maidana, Mauricio Carrasco no pudo conectar al gol. Sin embargo, en el comienzo del segundo tiempo, River dispuso de un penal inexistente sobre Alejandro Domínguez, que Cavenaghi cambió por gol.

Pero, a pesar del empate, nada cambió. River siguió sin dar más de tres pases seguidos y carecía de juego y llegadas claras de gol.

A los 84, cuando parecía que Aldosivi firmaba el empate, otra vez, tras un saque de esquina, Walter Zunino anticipó a Vella en el primer palo, y con un cabezazo volvió a desnivelar el marcador a favor del elenco marplatense, que ya empezaba a relamerse con el triunfo histórico.

Los últimos minutos fueron para el infarto. River, con el orgullo herido, fue a puro pelotazos en busca de salvar el invicto, pero la tarde fue negra desde el principio y no iba a cambiar. Aldosivi defendió con uñas y dientes la ventaja y apenas el arbitro Pablo Díaz, de pésimo arbitraje, pitó el final, la locura se desató en el estadio de San Lorenzo, en donde Aldosivi obtuvo el triunfo más importante de toda su historia.