El partido que Boca jugará ante Vélez el domingo en Liniers finalmente contará con la presencia de hinchas visitantes. Así lo dispuso el Comité de Seguridad, a pesar de los rumores sobre un posible enfrentamiento entre las dos facciones de la barra brava xeneize. Para evitarlo, las autoridades determinaron que sólo se le entreguen a Boca dos mil entradas, que deberán ser adquiridas exclusivamente por los socios a través del sistema de ranking del club, que por su parte deberá informar con nombre y apellido el destino de cada ticket expendido.

Con esta lista en su poder, el Comité de Seguridad buscará filtrar a los barrabravas para que no puedan ingresar al estadio de Vélez aplicándoles el derecho de admisión. Con esta medida, Boca busca junto a la autoridades apaciguar las aguas entre los sectores enfrentados de la barra del club, que lideran Mauro Martín y Rafael Di Zeo.

Precisamente, tras los allanamientos realizados el martes en la Bombonera, ambos barrabravas fueron citados a indagatoria por la Justicia, a través del fiscal penal, contravencional y de faltas de la Ciudad de Buenos Aires, Walter López.

Martín deberá presentarse hoy, desde las 9, por amenazas, en relación con una serie fotográfica en la que al actual jefe de la Doce se lo ve haciendo el gesto inequívoco de cortarle el cuello al jefe de la otra facción, Di Zeo, quien se hallaba en la tribuna de enfrente durante el encuentro entre Boca y Rafaela. Di Zeo, por su parte, deberá presentarse también hoy, desde las 14, acusado de ser instigador de una organización para cometer daños e ingresar al estadio sin entradas.

La fiscalía evalúa también la suspensión de la Bombonera, lo que provocó la reacción de los jugadores del equipo puntero del torneo Apertura, quienes no quieren verse perjudicados por la sanción. El volante Walter Erviti se mostró ayer molesto ante esta posibilidad. “Hemos pasado momentos difíciles y la gente siempre estuvo con nosotros. Ahora les podemos dar alegrías y nos duele que nos puedan suspender la cancha”, apuntó el ex Banfield y San Lorenzo. Y, en la misma tónica que Juan Román Riquelme, hábil frente a la prensa para hacer declaraciones sin mencionar la palabra barrabravas, Erviti agregó: “Lo mejor es que la gente de Boca esté unida y las cosas se organicen de la mejor manera posible. Lamentablemente, lo demás no lo podemos solucionar”.

Por otra parte, en el plano estrictamente futbolístico, el delantero Nicolás Blandi, autor de cuatro goles en los últimos dos partidos, es la gran duda que mantiene el DT de Boca, Julio Falcioni, para confirmar el equipo que visitará a Vélez. Blandi sufre una distensión en su gemelo izquierdo y el entrenador lo esperará hasta último momento. En caso de no llegar, su lugar lo ocuparía el juvenil Sergio Araujo. Mientras que, por el desgarrado Diego Rivero, podrían ingresar Cristian Erbes o Nicolás Colazo. Boca suma 31 puntos en el torneo y mantiene una racha invicta de 23 encuentros.