Juan Mónaco reaccionó a tiempo y revirtió un partido adverso al obtener ayer una valiosa victoria por 1-6, 7-6 (6), 1-2 y abandono ante el estadounidense Mardy Fish, para clasificarse a los cuartos de final del Masters 1000 de París-Bercy. “Nunca me desesperé, jugué concentrado y relajado y me salió bien. Levanté y gané el segundo set, que fue importante. Los dos estábamos un poco cansados y cuando él llamó al médico me sorprendió. Hay que aprovechar esa pequeña dosis de fortuna que a veces nos toca”, aseguró Mónaco luego del triunfo. El próximo rival será nada menos que Roger Federer, número tres del mundo, que ayer superó al local Richard Gasquet. Este encuentro comenzará a las 11.30 y será transmitido por ESPN.

El tandilense quebró el servicio de su rival en el comienzo y se escapó 30-0 con su saque. Sin embargo, cuando parecía que el argentino iba a liderar el juego, su nivel decayó. Fish, presionando con su derecha y su potente saque y volea, encadenó seis games seguidos para quedarse con el primer set con una llamativa comodidad.

En el segundo parcial, el argentino se afirmó mejor, comenzó a presionar con su servicio y su derecha, pero nunca pudo quebrar a su rival y la paridad se mantuvo hasta el final del set. Al promediar ese segmento, se dio un hecho curioso que sorprendió a Mónaco con una inesperada silbatina, que no lo tuvo como destinatario. La pantalla gigante del techo de Bercy mostró la llegada al estadio del ex entrenador del seleccionado francés de fútbol Raymond Domenech, e inmediatamente los más de diez mil franceses presentes comenzaron a abuchear al entrenador, mientras Mónaco se preguntaba con gestos si era a él a quien silbaban.

Al no sacarse ventajas, ambos debieron jugar el tie-break para definir. Fish comenzó a presionar con su servicio y sus voleas que resultaban letales para Mónaco. El nueve del mundo se escapó 5-2 ante un desconcertado Mónaco, quien con un nuevo error pareció dejar escapar el partido al situarse 4-6 abajo con dos match points en contra.

Pero el tandilense reaccionó y tomando riesgos pudo revertir la desventaja para igualar en 6, y con su servicio forzar dos errores de su rival y quedarse con el parcial y el set. Fish acusó el golpe anímico y encima tuvo problemas para correr. Fue atendido, pero no pudo continuar.