All Boys frenó a Lanús, que llegaba de bajar a Boca de la punta, y volvió a ganar después de tres partidos, al vencerlo 2-1 en Floresta, luego de arrancar en desventaja tras un golazo desde lejos de Víctor Ayala. Sin embargo, el equipo de José Romero lo dio vuelta gracias a una anotación de Iván Borghello y un penal convertido por Angel Vildozo. En esa jugada terminó expulsado Maxi Velázquez, por lo que los visitantes completaron el encuentro jugando con diez hombres.

All Boys arrancó mejor el partido, pero fue Lanús el que golpeó primero, con un remate desde 30 metros de Ayala que se metió por encima del cuerpo de Cambiasso. Sin embargo, el equipo local reaccionó rápido y llegó al empate con una jugada que despertó polémica, por la posición de Borghello. Coronel le bajó la pelota y, el delantero, adelantado, marcó el empate. Ya en la segunda parte, un grosero penal de Velázquez sobre Perea le dio a Vildozo la chance de convertir el segundo tanto. Así All Boys quebró la mala racha y respiró aliviado por su promedio. “Necesitábamos un triunfo así. Por nosotros, el cuerpo técnico y la gente”, indicó Borghello, que alcanzó a Ignacio Scocco con seis tantos como goleador del torneo. “Esto nos permite volver a creer un poco más en nosotros. Era un partido clave porque si perdíamos íbamos a estar en una situación difícil”, agregó el DT Romero.

Del otro lado, Guillermo Barros Schelotto mostró su bronca con el juez Federico Beligoy. “No puedo hablar del juego cuando el arbitraje fue tan malo. Ustedes qué quieren que comente del partido, si fue con un gol en offside y un penal”, se quejó el técnico de Lanús.