Independiente quedó eliminado de la actual edición de la Copa Sudamericana, al perder 2-1 anoche ante Universidad Católica, en Chile, el partido revancha por los cuartos de final. En el estadio San Carlos de Apoquindo, el conjunto de Avellaneda, que se presentó con una mezcla de jugadores titulares y suplentes, no pudo ante un adversario que había empatado 2-2 el choque de ida jugado la semana pasada. Michael Ríos, en ambas ocasiones mediante sendos tiros penales, logró los goles del local, que jugará una de las semifinales. El mediocampista Jonathan Santana, quien volvía ayer a jugar en el equipo de Américo Gallego, tras recuperarse de una lesión, había establecido la paridad provisoria, a los 35 minutos del primer tiempo.

El equipo chileno salió más tranquilo y ejerció el dominio del encuentro en el tramo inicial. Inclusive, cada vez que buscó incursionar por las bandas, Universidad Católica causó inconvenientes a una defensa visitante, que se armó de una manera poco habitual, con Samuel Cáceres jugando como lateral por derecha y Federico Mancuello por izquierda.

Con los ingresos de Osmar Ferreyra y Martín Benítez, Independiente apostó a ganar profundidad por los costados en el segundo tiempo. Y si bien estuvo cerca de llegar a la igualdad, no lo pudo conseguir. En un centro de Ferreyra, Godoy llegó con un cabezazo y el arquero Toselli mandó la pelota al corner. Luego, Independiente buscó con insistencia, pero le faltó la “última puntada”. Inclusive, con la entrada de Farías, el equipo tuvo más profundidad. El delantero se aproximó con una “palomita” que salió apenas desviada, tras centro de Ferreyra.

“Ahora tenemos la mente de lleno en el torneo local. Veníamos con la obligación de dejar todo y lo hicimos. Necesitábamos ganar y no pudimos. Pero la frente está en alto”, expresó el defensor Cristian Tula, luego del encuentro.