El clásico se quemó. Una bomba incendiaria fue arrojada anoche a la madrugada contra la puerta de la sede de Huracán, en la avenida Caseros, causando algunos destrozos. El ataque ocurrió a las 2.20, cuando un pequeño grupo lanzó un recipiente explosivo contra la puerta de ingreso a la entidad, mientras profería insultos contra el nombre del club.
“El artefacto explotó y provocó el estallido de los vidrios de las ventanas, quemó la puerta principal e incendió un pizarrón en el que estaban las anotadas las actividades diarias que se llevan a cabo en la institución”, informó el encargado general de la sede de Huracán, Oscar Meles.
“Se hizo la denuncia en la comisaría jurisdiccional y desde temprano se instaló una guardia policial en la entrada del club. Pero salvo esos destrozos, no hubo más daños que lamentar –señaló el empleado–. La verdad es que determinar de dónde provino esta agresión o identificar a quienes lo hicieron es imposible.”
El dirigente opositor Héctor Miguel anticipó que la anunciada caravana de hinchas de Huracán que se realizaría el próximo domingo “seguramente no tendrá mucha convocatoria, tanto por el horario del partido (a las 11) como para evitar incidentes”. Los hinchas de San Lorenzo ya anunciaron que irán vestidos de negro, en señal de luto por el descenso de Huracán.
En la Legislatura porteña, el legislador Cristian Caram pidió que el partido se jugara a puertas cerradas y con televisación por un canal de aire.
Mientras tanto, en San Lorenzo continúan los trabajos para garantizar el normal desarrollo del partido con el compromiso de su vicepresidente primero, Rafael Savino, quien está actuando en la organización junto al ex árbitro Javier Castrilli, subsecretario de Seguridad en los Espectáculos Futbolísticos.