Boca tuvo su cumpleaños feliz. En el 108° aniversario de su fundación, sufrió más de la cuenta, pero se llevó un trabajado triunfo 1-0 sobre Barcelona de Guayaquil, que lo pone muy cerquita de la clasificación para los octavos de final de la Copa Libertadores, algo que se puede cristalizar esta noche si Nacional derrota en Montevideo a Toluca. Nicolás Blandi, en el arranque del juego, anotó el único gol del encuentro.

Arengado por su público, eufórico desde el arranque con el cantito del cumpleaños hacia el club, y obligado por las circunstancias, Boca salió decidido a imponer su juego desde el arranque, ante un rival tan tímido como prolijo en el trato de la pelota. Con Riquelme como faro de sus ataques, el equipo de Bianchi comenzó a ejercer una presión que Barcelona no pudo soportar. En unas de sus primeras aproximaciones, el capitán aceleró en un corner para que Franco Sosa enviara un centro pasado. Con la defensa visitante desarmada, Burdisso cabeceó hacia adentro, donde la arremetida de Blandi, mano incluida, terminó de sellar la apertura del marcador.

Con la ventaja a su favor, Boca ya no arriesgó tanto y se paró unos metros más atrás. Eso significó dos cambios en el desarrollo: permitió que Barcelona le manejara la pelota en la mitad del campo y comenzó a desnudar algunas falencias ya crónicas en su última línea, aunque el liviano ataque ecuatoriano no supo aprovecharlas. A su favor, además, esta vez tuvo a Riquelme, en su rol de gran administrador. Es que si bien el capitán no jugó un partido superlativo, siempre le dio un destino seguro a la pelota. Con ese simple argumento, el ataque de Boca fue más fluido y ordenado, lo que se tradujo en menos trabajo para su defensa. Y también le alcanzó para generar algunas ocasiones de peligro, como un mano a mano que Banguera le tapó a Pol Fernández tras una asistencia de Riquelme o el cabezazo en el travesaño de Blandi, luego de un centro de Somoza. Del otro lado, el equipo de Gustavo Costas apenas inquietó con una media vuelta de Nahuelpán que Orion resolvió con solvencia.

Con plena conciencia de que una derrota le quitaba la remota chance de clasificación, Barcelona salió con otra actitud a jugar la segunda mitad. Presionó con más gente, buscó desbordar por la izquierda con la habilidad de Arroyo y provocó algunas aproximaciones riesgosas. Entonces, el juego se hizo más entretenido, ya que Boca empezó a padecer el desarrollo en su campo, con una defensa que no ofrecía garantías, salvo por la seguridad de Orion, pero al mismo tiempo comenzó a gozar de espacios para liquidar el partido de contragolpe, algo que pudo hacer con una linda apilada de Fernández que terminó con un remate alto o con un cabezazo débil de Blandi tras un buen desborde de Albín.

Claro que sus propias limitaciones al momento de defender lo condenaron a un sufrimiento excesivo. A más de un hincha se le paró el corazón cuando Caruzzo cruzó pelota y pierna de Damián Díaz en el área, cuando el juego se extinguía, pero el árbitro Marques dejó seguir. Así Boca selló una victoria clave, que lo deja cerca de la siguiente fase, aunque con la segura premisa de que debe mejorar mucho si pretende llegar lejos en la Copa.

1- BOCA

Orion; Sosa, Caruzzo, Burdisso, C. Rodríguez; Ledesma, Somoza, Erviti; Riquelme; J. M. Martínez, Blandi.

DT: Carlos Bianchi.

0- BARCELONA (ECUADOR)

Banguera; Saucedo, Perlaza, Erazo; Paredes, Gruezo, M. Oyola, Nazareno; D. Díaz; Arroyo, Nahuelpán.

DT: Gustavo Costas.

Estadio: Boca.

Arbitro: Ricardo Marques (Brasil).

Goles: 8m Blandi (Boc.).

Cambios: 10m G. Fernández por Ledesma (Boc.); 51m Albín por Sosa (Boc.); 62m Matamoros por Paredes (Bar.); 76m Ayoví por Gruezo (Bar.); 77m Viatri por J. M. Martínez (Boc.); 80m R. Oyola por Saucedo (Bar.).