Luego del cachetazo que le propinó San Martín en San Juan, Boca está intentando recuperar la calma. Tras la pública autocrítica de Carlos Bianchi a través de una carta, el entrenador ya está pensando en el equipo que colocará ante Toluca, en la última jornada del Grupo 1 de la Copa Libertadores. El que ya está descartado para viajar es Clemente Rodríguez, con una molestia muscular, que de esa manera se suma a Guillermo Burdisso, que tampoco irá a México, ya que será reservado por temor a sufrir una nueva amonestación.

Para tratar de dejar atrás la goleada, Bianchi trabajó a dos puntas. Por un lado, hizo una dura autocrítica pública. Instaló en el ambiente la palabra “vergüenza” y dejó en claro que a partir de ahora todos los recursos apuntarán a la Copa Libertadores. Y por otro, intentó minimizar puertas adentro algunas asperezas entre los jugadores, que afloraron en medio del encuentro ante San Martín. Por ese motivo, reunió a Juan Sánchez Miño y Matías Caruzzo, que tuvieron un larga discusión en pleno campo de juego justo antes de que Santiago Silva anotara el único gol boquense en el encuentro. La idea del entrenador es que ese tipo de incidentes no se hagan públicos y aumente la tensión que se vive en el club como consecuencia de los malos resultados.

En ese contexto, Bianchi probó una posible formación para visitar a Toluca e ir a buscar el primer lugar del grupo. Si bien ya está clasificado, una victoria le podría deparar un rival más sencillo y, sobre todo, evitar en octavos de final a Atlético Mineiro y a Corinthians, los dos equipos que mejor rendimiento tuvieron en la primera fase. Además, Nacional, líder con un punto más que el conjunto argentino, viajará a Guayaquil con suplentes y juveniles para medirse con Barcelona, lo que abre todavía más la chance de Boca de adjudicarse la zona.

El equipo en el entrenamiento de ayer fue con Agustín Orion; Jonathan Castillo, Leandro Magallán, Matías Caruzzo, Albín; Guillermo Fernández, Leandro Somoza, Walter Erviti; Juan Román Riquelme; Juan Manuel Martínez y Nicolás Blandi. De esa formación saldrá el juvenil Castillo, que no viajará a México, y ese lugar lo ocupará Cristian Cellay o Leandro Marín. Al momento de la práctica, en Boca todavía especulaban con la chance de que Clemente Rodríguez pudiera llegar, pero más tarde los estudios motivaron que quedara descartado. En tanto, la presencia de Magallán quedó garantizada, ya que Bianchi no quiere arriesgar a que Burdisso sume una tercera amonestación ante Toluca y, de esa manera, sea suspendido con una jornada en los octavos de final por acumulación de tres tarjetas amarillas.