Desde Hamburgo

Tiene 22 años y su carrera recién comienza, pero el día que el argentino Federico Delbonis mire hacia atrás y haga balance marcará en forma destacada el 2013, ese año que comenzó haciendo dudar a Rafael Nadal y continuó tumbando a Roger Federer.

Que Delbonis derrotara a Federer parecía improbable, no en vano el argentino es el 114 del ranking y el suizo el quinto. Pero en una soleada tarde en el elegante club Rothenbaum, el mismo escenario en el que el suizo alzó cuatro trofeos, el argentino jugó el partido de su vida y convirtió lo improbable en real. Hoy, en la que será su primera final en el circuito, se medirá con uno de los jugadores más en forma del momento, el italiano Fabio Fognini.

Zurdo como Guillermo Vilas, el máximo referente del tenis argentino, Delbonis era bastante desconocido para el gran público hasta hace medio año. Parte de eso comenzó a cambiar cuando el 6 de febrero en Viña del Mar se convirtió en el primer rival de Nadal en el regreso del español al circuito. Nadal ganaría 6-3 y 6-2, pero en los primeros compases Delbonis complicó al ex número uno del mundo.

Cinco meses y medio más tarde tuvo del otro lado de la red a otro ex número uno, y esta vez hizo mucho más que complicarlo. Fue un problema para Federer enfrentarse a un zurdo, teniendo en cuenta que Nadal, zurdo también, bate al suizo dos de cada tres veces que lo enfrenta. Delbonis cree que fue un factor que incidió ayer, al tiempo que descartó que el cambio de raqueta de Federer, que desde esta semana utiliza una más grande, haya perjudicado al suizo. “Creo que ser zurdo fue un punto a mi favor y clave en algunos momentos del partido”, comentó Delbonis, dueño de un buen saque y un juego con bastante margen de mejora aún.

Cuando un argentino se destaca en el tenis, la pregunta que surge se repite: ¿Quiere ayudar a su país a ganar la Copa Davis, la gran asignatura pendiente de su deporte? Delbonis no tiene dudas: sí, quiere. Pero prefiere que la iniciativa llegue de parte del capitán Martín Jaite y del subcapitán Mariano Zabaleta. “Los que toman las decisiones son Martín y Mariano. Ojalá. Para mí sería un sueño como lo es para todo tenista argentino ser parte del equipo de la Davis y dar una alegría al país. Ojalá. Si no es este año, el siguiente.”