Juan Román Riquelme se entrenó ayer de manera normal, al regresar a la actividad el plantel de Boca tras el empate con Argentinos, con lo que se afirma la probabilidad de que reaparezca el próximo domingo, ante Quilmes. Al mismo tiempo, después de realizarse los estudios pertinentes, se confirmó que Cristian Erbes sufrió un desgarro en el aductor derecho, por lo que está descartado como mínimo para las próximas dos fechas. Las dos novedades que marcaron la mañana en el complejo Pedro Pompilio abren otros tantos interrogantes respecto de la formación a disponer por el director técnico Carlos Bianchi frente a Quilmes, sin dejar de considerar que una fecha más tarde tendrá lugar el clásico ante River.

Riquelme, que había sufrido una distensión del gemelo externo izquierdo el 25 de agosto ante Estudiantes, desarrolló un intenso trabajo físico y después participó de una sesión de fútbol en espacios reducidos. El capitán completó así una hora y 20 minutos de exigente actividad, y será fundamental la respuesta física que presente hoy, tras el esfuerzo, para que pueda confirmarse o no su regreso a la competencia.

Con la eventual reaparición de Riquelme, el primer candidato a salir es Jesús Méndez, titular en los dos últimos partidos, para conformarse el mediocampo con Fernando Gago, Pablo Ledesma y Juan Sánchez Miño, pero no puede descartarse la posibilidad de que el reemplazado sea el último de los nombrados.

En cuanto a la baja de Erbes, que venía jugando en las cuatro fechas anteriores como lateral derecho, fue reemplazado en los minutos finales ante Argentinos por Gonzalo Escalante, pero el juvenil Alan Aguirre es el único ocupante natural de esa posición que tiene disponible Bianchi.