Independiente desperdició una buena oportunidad de acercarse a los puestos de ascenso a Primera División, al igualar ayer 1-1 con Unión, de local, en un partido postergado de la 11ª jornada del torneo de la B Nacional. El gol del conjunto que dirige Omar De Felippe fue marcado por Daniel Montenegro, de penal, en la primera parte, mientras que el uruguayo Brahian Alemán igualó para la visita, en el inicio de la segunda etapa.

Con el empate, Independiente, que venía de ganarle a Crucero del Norte, sumó 18 puntos, quedó a 14 del líder Banfield y a cinco del tercer puesto, último que otorga un pasaje a Primera División, que hoy lo tienen los santafesinos. Del otro lado, Unión, que acumuló cinco encuentros sin derrotas con tres triunfos y dos empates, alcanzó las 23 unidades y quedó por primera vez en el campeonato en puesto de ascenso. El partido fue entretenido, con mucho ritmo, cambiante y con muchas situaciones de riesgo.

El local comenzó mejor, con mayor predominio en el manejo de la pelota y del terreno. Sin embargo, la primera chance fue para la visita, después de un contraataque en el que Moreno se jugó la personal ante la marca de Tula, definió de zurda, rasante, y el arquero Rodríguez salvó muy bien y envió la pelota al corner. En la siguiente, Montenegro habilitó a Menéndez, que definió con cierta displicencia ante la salida de Daniel Islas y el arquero se quedó con el duelo. Pero el delantero se redimió unos minutos más tarde, cuando peleó una pelota dividida en el área y el arquero visitante le cometió penal. El remate lo ejecutó Montenegro, que falló en primera instancia, pero anotó cuando se repitió por el adelantamiento de Islas.

En la segunda parte, Unión salió decidido a buscar el empate y en la primera que tuvo, el apuntado Moreno estrelló un derechazo en el travesaño. En la acción inmediata, Unión igualó. Hubo una corrida espectacular de Sebastián Palacios por la derecha, que dejó a tres defensores en el camino, envió el centro y Alemán, de cabeza, convirtió.

Después del empate, Independiente sintió el golpe: Pisano y Montenegro desaparecieron y el equipo careció de fútbol para buscar el triunfo. En los últimos minutos buscó con más empuje que imaginación, pero ya era tarde. Los jugadores de Independiente abandonaron el campo de juego rodeados de silbidos.