DEPORTES › EL TéCNICO DE LA SELECCIóN ARGENTINA A DOS MESES DEL MUNDIAL
Alejandro Sabella le concedió una entrevista a la página web de la FIFA en la que habló de la dependencia del astro, pero admitió que alienta planes alternativos por si no puede contar con él. Una vez más evitó dar precisiones sobre la ausencia de Tevez.
Alejandro Sabella, el técnico del seleccionado argentino, afirmó que Lionel Messi es insustituible en el equipo nacional, al punto de que “se siente cuando no está”. En una larga nota que le dio a la página web de la FIFA, el entrenador habló de su temor “al fracaso más que al triunfalismo” a dos meses del debut en la Copa del Mundo. “El éxito puede ser peligroso. Es mejor mantener la serenidad en la derrota y la humildad en el triunfo”, afirmó en la entrevista que se reproduce a continuación:
–No soy de pensar en plazos muy largos... Primero me concentraba en la eliminatoria; después de la clasificación, en la doble jornada que quedaba, ante Perú y Uruguay; luego en los amistosos, el sorteo... Es difícil dar una respuesta. Sí puedo admitir que la ansiedad va creciendo porque se va acercando el momento.
–Poco. En casa trato de abstenerme y la familia ayuda, porque sabe a las presiones a que uno está sometido. Si bien es cierto que te ven trabajando más en casa que cuando dirigís a un club, te dejan tranquilo. Los fines de semana, por ejemplo, estoy en el living mirando un partido tras otro. ¡El sillón está cada vez más hundido! (risas). En líneas generales pasa lo mismo con los amigos. Ellos saben que cuando estoy en casa me gusta relajarme.
–(...) En realidad, te daría una tercera que vendría a ser un término medio: el rival principal somos nosotros. Si estamos bien, podemos suavizar la dificultad del grupo. Si no estamos al ciento por ciento y metidos como corresponde, todos los rivales serán muy difíciles y el grupo claramente puede complicarse.
–¡Nervioso! A veces debo dividirlos con mis colaboradores porque muchos partidos se juegan a la misma hora, pero a todos nos pasa lo mismo, los miramos pensando en que no se lesionen. No es que me duela la cabeza, pero si veo un jugador que se cae, la preocupación existe: si se levanta rápido, bien; si sale, nos ponemos a averiguar lo antes posible por qué... Sí, sufro un poco con ellos. Uno espera que tengan un buen rendimiento, pero lo más importante es que no les pase nada.
–¡Sólo cuando veo un partido donde no hay un jugador nuestro lo disfruto!
–Siempre tenés que tener un plan B. Lo que sucede es que cuando vos hablás de jugadores de semejante jerarquía.... Tenés que tener una lista tentativa, posibles reemplazos, pero la realidad indica que, si bien el plan B a veces se acerca bastante al plan A, a veces no tanto. Entonces uno debe adaptarse.
–Nosotros hemos jugado varios partidos sin Leo, pero él es insustituible. Ningún equipo o selección del mundo puede jugar igual con o sin Messi. Tiene una preponderancia tan grande que cuando no está, se siente. Deberemos ver cómo nos acomodamos llegado el caso y el partido puntual, pero una idea hay. De hecho, contra Italia en Roma no jugó él, pero tampoco Agüero y pudimos adaptarnos. Nunca vamos a ser lo mismo, pero volveremos a hacerlo si es necesario.
–No lo sufrí tanto como cuando volvió a jugar. ¡Si lo tuvimos acá un mes, viéndolo de cerca! Los nervios regresaron cuando saltó a la cancha otra vez...
–No me caen mal, son entendibles. Cuando uno compara la potencialidad ofensiva con la defensiva, siempre tiene las de perder la defensa. Después debo analizar cada crítica y ver de cuál puedo sacar provecho para solucionar algo eventual. Puedo decir “esto me sirve, esto no”, pero no leer o escuchar todo. Como cualquiera, con el tiempo uno le presta más atención a ciertas opiniones por encima de otras.
–¡Salvaje es una palabra muy dura! Esto es la Selección Argentina, y lo mismo sucede en el país a nivel clubes: tiene más difusión lo que pasa en River o en Boca que en otros equipos. Detrás de la Selección hay un país, y cada uno tiene su opinión. Son las reglas del juego. Yo ya las sabía de antes.
–En este mismo contexto, en el de la opinión de otros. Y como dije antes, yo leo, escucho, miro y luego trato de sacar las conclusiones del caso.
–No me gusta hablar de los jugadores que no están, me parece lo mejor para todos. Ni de Tevez ni de nadie, aunque entiendo que hablen más de él que de otros casos.
–¡Salgo poco! Cuando lo hago, veo el fervor del argentino pasional que se ve campeón. Yo nací escuchando que éramos los mejores del mundo cuando todavía no habíamos ganado nada. Es algo normal, es nuestra manera de ser. A veces nos creemos más de lo que somos y la realidad nos hace tocar el suelo. Los triunfalismos son malos, hay que trabajar con humildad.
–A la posibilidad del fracaso, por supuesto. Lo que pasa es que el triunfalismo te puede ayudar a perder la óptima de las cosas, y eso puede llevarte al fracaso. O quizá llegar a un lugar que para muchos es fracaso y para otros no.
–El éxito puede ser peligroso, hay que tener los pies sobre la tierra. Mi idea siempre fue mantener la serenidad en la derrota y la humildad en el triunfo. Es mejor, claro está, tener éxito y ver cómo manejarlo que lidiar con el fracaso.
–Debería pensarlo, pero creo que no... Quizás alguna vez se me cruzó por la cabeza el estar en la final, pero apenas algunos segundos. ¡Diría que casi nada! La realidad me indica que hoy debo pensar en otras cosas.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux